La información en la que el Sergas atribuye la falta de enfermeras disponibles a las bajas y la cercanía de las oposiciones ha incendiado al colectivo eventual, que ha manifestado su indignación a través de las redes sociales. En ellas, subrayan que la situación es fruto de "la mala gestión de las listas" y de la política de contratación del Sergas, con un elevado porcentaje de eventualidad en enfermería hospitalaria y vínculos muy cortos avisados con poca antelación.

Recuerdan que tienen la obligación de presentarse a la OPE para puntuar en las listas de contratación y recuerdan que el Sergas le ha dado mayor prioridad en la última convocatoria frente al tiempo trabajado. Reprochan que conciliar trabajo y estudios no es tarea fácil, "pero mucho menos cuando sabemos nuestros turnos laborales con una semana de antelación y siempre sujetos a cambios.

Sostienen que muchas bajas se deben a la presión de los continuos cambios de servicio, lo que les impide ganar experiencia. "Para alguien medianamente responsable genera mucha ansiedad, siendo consciente que trabajamos con vidas". Denuncian que esto no pasaría si sacaran más plazas en las oposiciones para reducir la eventualidad.