La expectación generada por el próximo lanzamiento de PSA se ha trasladado a la terminal de Bouzas una vez definidas las previsiones de exportación para el próximo año de la factoría de Balaídos. Con respecto a la cadencia actual, la entrada diaria de coches al recinto portuario aumentará más de un 53% formando una caravana de 2.300 unidades liderada por el nuevo todocamino V20. Un flujo de intensidad solo comparable a la que registraban los muelles Ro-Ro cuando en 2007 la planta viguesa alcanzó su récord histórico de producción al sumar 547.000 vehículos.
Las cifras del avance exportador ya trasladadas a los operadores brinda a estas empresas otro argumento para justificar el aumento de superficie que vienen demandando desde hace tiempo, esta vez más confiados a la vista de la ampliación en marcha. Pero ahora lo urgente pasa por ir mejorando desde ya la logística y optimizar espacios para gestionar, sin los agobios sufridos antes del pasado verano con el lanzamiento de las K9, esos volúmenes que crecerán "de 500 a 600 coches más al día" en 2020 en Bouzas, según fuentes de PSA.
En la actualidad, de las 1.700 unidades que fabrica diariamente PSA-Vigo, el 80% salen hacia Bouzas. Un porcentaje que podría replantearse al alza de confirmarse las previsiones de la marca respecto a la comercialización del todocamino, el nuevo SUV de Peugeot llamado a convertirse en el siguiente "superventas" del grupo. Sin esperar a los resultados de un coche que todavía será presentado en sociedad en la próxima edición del Salón de Frankfurt del próximo septiembre, las empresas de la terminal ya dan por hecho que la exportación en 2020 superará el 85%. Basan su estimación en los volúmenes que ya embarcan ahora de modelos recién colocados en el mercado, en referencia a la generación de la furgonetas K9, y en lo que también admite la factoría, que el próximo año rebasará la barrera de los 500.000 anuales.
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No solo PSA pondrá a prueba la capacidad de la explanada boucense para asumir todo lo que producirá Balaídos con destino al exterior. Otras marcas como Renaut, que desde hace unos años embarcan por estos muelles modelos fabricados en sus plantas de Valladolid y Palencia, también aumentará su cadencia exportadora en 2020 con la previsión de rebasar los 30.000 unidades. Y esto a pesar de la complejidad logística de enviar coches desde las plantas castellanas en un lento convoy ferroviario hasta Porriño.
Además de coches, en la campa estacionan esas plataformas ( mufis) y semirremolques (SR) donde viajan desde piezas de automoción a toda clase de carga, como bobinas de acero o planchas de pizarra. Es una modalidad de transporte muy potenciada en los barcos de la autopista del mar Vigo-Francia y en la extensión de esta línea hacia Tánger. De momento en esta ruta marroquí el trasiego de mufis o SR son flojos, aunque todo apunta que en un año su presencia en los buques de Suardiaz experimentará una subida notable por la producción de PSA en Kénitra y el intercambio de piezas con Balaídos.
