La propuesta del grupo Marea de Vigo de solicitar al Gobierno central la inclusión de la conexión de la ciudad olívica con Oporto en el Corredor Atlántico de mercancías salió adelante en el pleno de ayer con los votos a favor del grupo encabezado por Rubén Pérez y del PP. Los ediles socialistas se abstuvieron. El portavoz de Marea subrayó la necesidad de incluir este tramo dentro de la Red Básica Transeuropea de Transportes con el objetivo de que se halle en funcionamiento en 2030 y Elena Muñoz valoró que la denominada salida sur es "fundamental" para el puerto de Vigo. La corporación reclamó al Gobierno recursos presupuestarios para la conexión Vigo-Oporto y que solicite adicionalmente financiación para el proyecto a la Unión Europea.

El portavoz socialista, Carlos López Font, volvió a insistir en que la "prioridad" de la ciudad debe ser la variante del AVE por Cerdedo, que permite acortar la duración del trayecto a Madrid desde la urbe gallega.

El pleno revivió ayer las insalvables diferencias entre los diferentes grupos municipales de la corporación. Por ejemplo, en la propuesta del grupo socialista de instar a la Xunta a que no ejecute el contrato de 600.000 euros destinado a colocar el rótulo "Hospital Público" en diez centros sanitarios de Galicia, el Álvaro Cunqueiro entre ellos, y que se destine el importe a la construcción de un nuevo aparcamiento público gratuito en el hospital vigués. La moción fue apoyada por los concejales de PSOE y Marea de Vigo y rechazada por los del PP.

"Gastar ese dinero en poner carteles es una inmoralidad. El único objetivo es hacer creer que lo que es privado es público. Esto es campaña electoral, ni más ni menos", defendía el portavoz socialista. Ángel Piñeiro, del PP, justificaba el voto en contra de su grupo alegando que "esos rótulos son una mejora de la sinaléctica para mejorar el ahorro energético y la visibilización de los hospitales públicos. Inmoral es gastarse un millón de euros todos los años en luces de Navidad de quita y pon", valoró el edil popular.

El PSOE denuncia que el Cunqueiro es un hospital privado. "Lo que piden los vecinos es que sea público, pero de verdad y no por el rótulo, y piden un aparcamiento gratuito para dejar de tener que soportar un copago a la sanidad", recogen en la moción presentada.

Donde sí hubo unanimidad fue en la propuesta también socialista que solicitaba instar a la Xunta a que retome las obras iniciadas en Navia en 2017 y que llevan tiempo paralizadas. Concretamente en las calles Lamelas, Pedra Seixa, Limpiño y Poza do Cabalo. El PSOE considera que la situación de estas calles es "lamentable", y las quejas de los vecinos son continuas por la incidencia de este atraso "injustificable". "Existen problemas de iluminación, de seguridad, pasos de cera y aceras sin acabar... Para una obra que la Xunta tiene que hacer en Vigo y la hacen mal", lamentaba el concejal de Fomento, Javier Pardo. El PP votó a favor pese a considerar que se trata de una "obriña". Elena Muñoz achacó los retrasos a un problema con la adjudicataria.

La abstención socialista también permitió aprobar la propuesta del PP de instar al futuro Gobierno central a "cumplir la Constitución y garantizar a las familias y los padres la libertad de elección de centro educativo. Los populares consideran que la actual ministra de Educación, Isabel Celaá, está dando preferencia a la escuela pública sobre la privada. Marea rechazó esta propuesta al asegurar que "es ridículo pensar que en este país no hay libertad a la hora de elegir colegio". El pleno también sacó adelante solicitar a la Xunta que transfiera la competencia al Concello de la gestión del río Lagares y a que emita en un plazo de quince días el informe de afectación al patrimonio del proyecto de reestructuración del muro en la Baixada á Igrexa en Teis.

El presidente del pleno, Abel Caballero, no aceptó la moción de urgencia presentada por el PP que reclamaba poner en práctica el acuerdo aprobado hace un año "para acabar con la discriminación entre las retribuciones de policías y bomberos de Vigo.