La ciudad estrenará en cuestión de meses una nueva forma de circular por el asfalto. Y será en una de sus arterias principales: Travesía de Vigo. El Concello permitirá a los ciclistas entrar de lleno en el asfalto con los mismos derechos y obligaciones que los vehículos a motor. Para ello, se rebajará de 50 a solo 30 km/h la velocidad máxima en toda esta calle como una de las medidas para proteger a los usuarios de la bicicleta. Será así al menos en el carril de la derecha y en ambos sentidos de circulación, ya que comenzará a funcionar como un ciclocarril. Esta modalidad de espacio compartido ya se utiliza en otras ciudades europeas y españolas, como Madrid, pero es totalmente nueva y desconocida para los vigueses. El Concello estudia ahora si rebajar también el límite en el de la izquierda o dejar una calle de dos velocidades.

Esta medida forma parte del proyecto que ya se está ejecutando y que financia el Concello y la Diputación de Pontevedra para conectar Samil con Teis a través de una vía ciclista. En la gran mayoría de sus 10 kilómetros de largo los usuarios de la bicicleta circularán por un carril bici. Es decir, un espacio exclusivo para ellos al margen del asfalto y las aceras -probablemente se permitirá también la circulación de patinetes eléctricos-. Pero al llegar a Travesía de Vigo -y también en el tramo de Camelias entre Plaza de América e Independencia- desaparecerá la senda verde específica y los ciclistas pasarán a circular codo con codo con coches, motocicletas, furgonetas o camiones.

El ciclocarril es un carril de coexistencia entre bicicletas y vehículos a motor. La Concejalía de Tráfico lo señalizará a tal efecto a lo largo de los dos kilómetros de Travesía de Vigo. Tanto a la ida, como a la vuelta. Y lo hará con señales verticales -entre ellas las de limitación de velocidad a 30 km/h- y también con marcas sobre el pavimento. El Concello seguirá probablemente las mismas pautas que en el resto de ciudades en los que ya hay implantados este tipo de carriles compartidos. Por ello, todos los vehículos deberán adaptarse a la velocidad de los ciclistas que lleven delante. Y, aún cuando no hubiera ninguna bicicleta circulando, tendrán que respetar siempre el límite de 30 km/h.

Así debes circular por el carril bici de la Travesía de Vigo

Carril bici en Vigo: obligaciones de los ciclistas

Los ciclistas tendrán que respetar las mismas normas de tráfico que el resto de vehículos -la concesionaria Esycsa ha instalado ya todos los semáforos por los que se tendrán que regir- y no estarán obligados dentro del ciclocarril a pegarse al margen derecho, sino que podrán -y deberán- circular por el centro del mismo. Si algún conductor los quiere rebasar, deberá utilizar para ello el carril izquierdo. "Circular pegados a la derecha supondría un gran peligro para los ciclistas cuando los usuarios de los coches aparcados abrieran las puertas para salir y entrar en sus coches", ejemplifica desde la asociación A Golpe de Pedal.

Los ciclistas tendrán por lo tanto que ocupar la parte central del ciclocarril. Además, podrán invadir otro siempre que precisen realizar un giro a la izquierda o realizar algunas maniobras como sobrepasar a un vehículo que esté parado. De hecho, Travesía de Vigo es una de las calles de la ciudad donde más extendido está el aparcamiento en doble fila, una infracción que el Concello deberá tratar de atajar una vez que se abra este ciclocarril.

Según ha podido saber este periódico, el Concello está contemplando realizar una campaña informativa previa a la puesta en marcha de esta nueva vía ciclista, tanto del carril bici como del ciclocarril de Travesía, con el objetivo de que usuarios de la bicicleta y conductores de vehículos a motor sepan cómo deben circular.

Carril bici en Vigo: los antecedentes

En Madrid, por ejemplo, se editó un manual de convivencia entre coches y bicicletas y se editaron también trípticos con normas y precauciones. En ellos se recogen tanto las formas en que los ciclistas deben señalizar sus maniobras (giros a derecha e izquierda o stop, por ejemplo), como las precauciones que deben tener los conductores del resto de vehículos. Entre ellas, se fija la necesidad de adelantar a los ciclistas cambiando de carril y dejando una separación mayor a 1,5 metros; mantener una distancia de seguridad con las bicicletas de 5 metros para no "atosigar" a los ciclistas o mirar por los retrovisores antes de abrir la puerta de un vehículo estacionado para evitar un accidente.