Lo que parecía un portazo con llave y candado a Ryanair por parte del Concello, podría haber sido solo un aviso. O al menos así lo trasladó ayer públicamente el alcalde, Abel Caballero. La marcha definitiva de Vigo de la low cost irlandesa es irreversible. Pero el Gobierno local volverá a contactar con ella para que regrese a Peinador. "En algún momento retomaremos el diálogo con ellos. Yo nunca cierro las puertas y quiero reconocer que hicieron un buen trabajo", resaltó el primer edil vigués en una entrevista en Radio Vigo.

Caballero censuró que la aerolínea quisiera "echarle un pulso" haciéndole una propuesta de convenio que -remarcó- era "absolutamente inasumible" para Vigo. "Se subieron a la parra y se metieron en el oportunismo electoral. Echaron un pulso y lo perdieron", dijo. Por ello, la aerolínea decidió quitar el vuelo diario de Barcelona y también las rutas de Dublín y Londres que iba a operar de abril a octubre y que ahora solo funcionarán en abril.

El alcalde, que aseguró que siguen buscando aerolíneas interesadas en cubrir ahora el hueco que deja Ryanair, fue más allá sobre sus objetivos para Peinador. "En el medio plazo hay que contar que Vigo tiene que ir a por los 2 millones de pasajeros anuales. Y yo confío en seguir de alcalde para conseguirlo", subrayó.