Suardiaz adapta la extensión a Tánger de la autopista del mar a Francia a las previsiones del sector de automoción vigués recuperando las dos escalas semanales entre Vigo y el próspero enclave magrebí. La naviera ha tardado poco en cumplir con la planificación anunciada en este periódico por su presidente Juan Riva cuando en diciembre garantizó que a partir de enero volvería a operar "si o sí" la doble frecuencia semanal. Al cabo de un mes de análisis de la ocupación de sus bodegas tras iniciar PSA el envío de motores fabricados en Marruecos para montarlos en los nuevos chasis de Balaídos, la armadora reanuda la línea conforme a como la inauguró en abril de 2017.
Desde la fecha inaugural, la conexión Vigo-Tánger ha registrado varios cambios, empezando por el recorte de dos a una escala por semana. Y pese a los esfuerzos comerciales de la armadora sobre todo en el área industrial marroquí por captar clientes, desde entonces es Renault con los coches de su filial Dacia la marca predominante en las bodegas de sus barcos, aunque ni mucho menos en volúmenes suficientes para hacerla rentable. Pero la llegada el pasado 30 de noviembre de semirremolques con componentes para la planta de Balaídos ha atraído las miradas de otras industrias de la automoción con sedes en Vigo y también en Marruecos que se preparan para usar esa línea a medida que se acerque la fecha de la fabricación en serie de PSA en Kénitra, fijada para este próximo abril.
Suardiaz quiere situarse a la cabeza de la oferta a estas empresas generadoras de mercancías consciente de que las astronómicas cifras de producción automovilística de Marruecos -se cifran por encima del millón de vehículos en 2020- acabarán por activar la competencia de otras navieras en esta ruta. Una poderosa razón para operar, ahora sí de forma regular, las dos escalas por semana Vigo-Tánger.
De acuerdo a lo comunicado a los responsables de operaciones de la Autoridad Portuaria, el funcionamiento del servicio marítimo a Tánger será muy similar a como se inauguró en la primavera de hace dos años hasta su reducción a una escala meses después. Será cubierto por los buques Galicia, Tenerife Car e Ivan, tres veteranas unidades de eslora comprendida entre 149 y 102 metros, y una capacidad de transporte de hasta 1.200 vehículos y medio centenar de semirremolques.
La rotación diseñada garantiza la presencia en Bouzas de dos de estos barcos los martes: uno procedente de Tánger que zarpa sobre las 12.00 horas hacia Saint Nazaire (Francia) y continúa rumbo Zeebrugge (Brujas-Bélgica); y otro que llega de esta terminal belga y sale de Vigo en torno a las 20.00 horas en dirección Tánger. De la escala del viernes se encarga en exclusiva el Ivan, el menor y también el más lento de los tres al invertir 40 horas en una travesía directa que los otros cubren en 25 horas.
"De momento la carga flojea"
Aun convencidos del potencial de esta ruta, en la terminal Ro-Ro se valora el esfuerzo económico que dedica Suardiaz anticipándose a una doble escala que a pesar de las grandes expectativas "de momento la carga flojea", aseguran fuentes estibadoras. Donde también tienen muy presente la apuesta de la armadora por una conexión que definen como "estratégica para Vigo" es en la Autoridad Portuaria, de ahí su empeño en conseguir lo que necesite la compañía para aumentar las mercancías en estos barcos, como un Puesto de Inspección Fronteriza (PIF) en Bouzas.
Hasta que la terminal boucense disponga de este puesto de control aduanero la armadora tiene vetado la descarga de perecederos de Marruecos. Así se lo ha comunicado Sanidad Exterior también por carta al Puerto pese a que esta institución le ha contestado reprochándole el agravio que supone su negativa a Vigo frente a Barcelona, donde sí acepta desembarcar mercancía fresca de terceros países en muelles sin instalación inspectora. El último episodio de este cruce epistolar fue la autorización al Puerto para que construya un nuevo PIF en el muelle Ro-Ro, y esto es lo que hará. "La decisión está tomada", recalcó ayer su presidente, Enrique López Veiga.
La desesperación del naviero Juan Riva por estas trabas de Sanidad le llevó incluso a ofrecerse a pagar esta nueva instalación. Sin embargo, el presidente portuario dice ahora que "se hará con cargo a la Autoridad Portuaria". El problema es dónde edificarla. En este recinto no sobra precisamente el espacio y el existente buena falta hará para estacionar los ingentes volúmenes de coches que se esperan. Sin olvidar el tiempo que tardará esta sede aduanera en estar lista, que podría demasiado tiempo para que Suardiaz logre conservar esos contratos pendientes de cerrar desde hace meses.
