Los pasajeros de avión Vigo-Madrid de Iberia que el pasado lunes partieron de Peinador a las 9.25 horas tuvieron un pequeño susto cuando ya enfilaban la pista de Barajas para aterrizar. El avión volvió a acelerar cuando estaba ya a solo 600 metros de tocar tierra y frustró el aterrizaje. Tras dar un nuevo rodeo, a Madrid, tomó tierra sin problemas. Según varios viajeros que iban en esa aeronave, el comandante informó que tuvo que abortar la maniobra porque había otro avión cerca.

Iberia confirmó ayer a este periódico que el avión dio la vuelta cuando estaba aproximando, pero no los motivos. Fuentes oficiales de Enaire desmintieron que hubiera un avión cerca y aseguraron que el Iberia no tenía la "aproximación adecuada" para el aterrizaje, por lo que hizo la conocida maniobra go around (motor y al aire o aterrizaje frustrado).