Un hombre de 51 años, natural de Vigo, falleció en la madrugada de ayer sobre las 2.45 horas, en los calabozos de la comisaría de la Policía Nacional en la calle Álvaro Cunqueiro, tras sufrir un paro cardíaco, según fuentes policiales.
El varón había sido detenido por la Policía Local de Redondela tras haber causado problemas en la vía pública, según las mismas fuentes. Al parecer, antes de su arresto se enfrentó también "muy agresivamente" a los agentes municipales, circunstancia que motivó su traslado al PAC de urgencias antes de entrar en los calabozos de Vigo.
Una vez atendido por el servicio médico, ingresó en las dependencias de la comisaría viguesa, pero como su estado de agresividad no remitía se solicitó de nuevo la presencia de los servicios sanitarios, siempre según el atestado policial.
Posteriormente, el servicio de seguridad de la Policía Nacional en los calabozos observó que el detenido no se encontraba bien, por lo que se reclamó otra vez la presencia de los servicios médicos "momento en que el detenido sufrió un paro cardíaco", según la información oficial.
Los servicios de emergencias intentaron reanimar a la víctima en la sede policial durante más de 30 minutos, siendo infructuosos todos los intentos de los sanitarios que, no pudieron evitar que falleciera.
La muerte del detenido fue comunicado al Juzgado de Instrucción número 7 de Vigo, en funciones de guardia, que determinó la presencia del médico forense en la comisaría.
El cadáver fue trasladado después al centro de salud Nicolás Peña, donde se le practicará la autopsia. El informe forense determinará las causas y las circunstancias en que se produjo el fallecimiento del detenido en los calabozos policiales y, en función de los resultados que se obtengan, el juzgado de guardia determinará las diligencias a practicar.
