Seis pitidos dan la alerta de emergencia. Un incendio en el cuadro de mandos, una rotura o un fuerte oleaje pueden ser alguna de las circunstancias que obliguen a los tripulantes y viajeros de una embarcación a abandonarla. No son situaciones habituales, pero saber cómo abordarlos puede salvar vidas. Por ello, la naviera Piratas de Nabia y cerca de un centenar de alumnos del Instituto Marítimo Pesquero de Vigo organizaron esta mañana un simulacro de evacuación de buque en alta mar, si bien en este caso, la actuación tuvo lugar en la próxima dársena de A Laxe.
Un instante del ejercicio marítimo desarrollado esta mañana en Vigo // MARTA G. BREA
Para garantizar el éxito de la evacuación, ésta debería realizarse en 20 minutos. Esta mañana, el proceso se alargó unos minutos más, pero todos los viajeros consiguieron volver de regreso al barco sin lamentar heridos ni caídas al agua. La tripulación de la naviera facilitó previa demostración una charla sobre seguridad a los jóvenes para que luego se subieran a una lancha salvavidas con capacidad para 100 personas. Profesionales y estudiantes permanecieron en el bote durante varios minutos mientras les explicaban cómo remar hacia el bote de nuevo, siempre armados con un chaleco salvavidas por si hubiese cualquier contratiempo.
