La reactivación de los planes de ampliación del polígono de Balaídos para ganar suelo industrial y a la vez mejorar su integración en el entorno ha cogido "por sorpresa" a los vecinos de Matamá, que creían que el proyecto había caído en el olvido. "Desconocemos si va a ser el mismo desarrollo que el inicial, por ello estamos todavía muy cautelosos", reconoció ayer Manuel Costas, presidente de la asociación vecinal.

"El miércoles hablé con la responsable de Relaciones Institucionales de PSA y ya nos trasladó la idea de reactivar la ampliación, pero creímos que podría hacer frente a la zona más industrial, que eran 50.000 metros cuadrados porque está claro que necesitan un parking para camiones, somos conscientes. Pero si realmente son los 240.000 m2 [como figuraba en el proyecto original] sí nos sorprende porque afecta a más de 30 viviendas que tendrían que ser expropiadas", apuntó.

Para abordar el tema, los vecinos se reunieron ayer en la asociación, donde trasladaron sus preocupaciones. Además solicitarán"posiblemente" una reunión con Zona Franca para conocer más detalles del proyecto. "Hay que pensar también en los vecinos, que aunque somos menos que PSA también somos importantes", valoró el presidente vecinal. El alcalde, Abel Caballero, ya avanzó el miércoles que cualquier actuación se haría con el consenso de los vecinos de la parroquia.