Con su llegada a la playa de Samil, las extravagantes criaturas marinas mucho más conocidas por inspirar a la monstruosa alimaña de la película "Alien, el octavo pasajero" que por la especie a la que pertenecen ( Phronima sedentaria) perdieron su anonimato. Hasta que este sábado cuando, como publicó ayer FARO, apareció esa decena de ejemplares ocultos en sus diminutas "cápsulas" la comunidad científica gallega carecía de registros gráficos de estos inquietantes crustáceos en aguas interiores. Pero además de no haber constancia en Galicia, el valor de las imágenes grabadas por biólogos del Instituto de Investigaciones Marinas (IIM) del CSIC de Vigo trascienden las fronteras de esta comunidad por cuanto tampoco existen referencias documentales de estos animales en la orilla de un arenal urbano y mucho menos nadando en las bases de datos de los centros dedicados al estudio del medio marino en España.

"Hasta ahora solo sabemos de esta especie por campañas oceanográficas a gran profundidad", comentaban ayer desde Observadores del Mar, una plataforma coordinada por el Instituto de Ciencias del Mar de Barcelona (CSIC) dedicada a la recopilación y análisis de hallazgos reportados desde pescadores deportivos hasta embarcaciones en alta mar. Esta precisión coincide con la aportada a este periódico por Álvaro Roura, el biólogo del grupo Ecobiomar del IIM de Bouzas que tuvo a las Phronimas cuatro días en su laboratorio, ya que él también pudo observarlas de cerca por una recogida de muestras extraídas a 500 metros de fondo durante una investigación en Marruecos.

Este experto volvió a insistir ayer en que la "excepcionalidad de este regalo del mar" en alusión al hallazgo en Samil, "radica en que se produjo en una playa". Sin olvidar que la estancia de estos minúsculos inquilinos en su laboratorio y posterior devolución al mar ofreció imágenes únicas de un crustáceo anfípodo tan característico del paisaje abisal que figuran entre los más avistados por los submarinos.

Alien desembarca en la Ría de Vigo

Alien desembarca en la Ría de Vigo

Los científicos consultados sobre este desembarco "alien" en el arenal vigués hacen otra puntualización. Apuntan que tal vez alguien, al igual que el expatrón mayor de Vigo, pudo haberse topado con uno de los "barriles" transparentes que emplean estas criaturas como medio de transporte y de supervivencia paseando por una playa cualquiera de la costa nacional, y en cambio, a diferencia de lo que hizo Julio Alonso, no lo notificase a un centro de investigación o una autoridad pública. Sin embargo, para los expertos guardarse este descubrimiento parece improbable "sobre todo si es así de masivo", porque puede que por el tamaño de las cápsulas -apenas alcanzan los tres centímetros- pasen desapercibidos a ojos de cualquiera, aunque de coger uno con la mano observaría sin ninguna dificultad cuánta vida hay en su interior. Y es mucha, ya que al igual que las de Samil, suelen portar cientos de larvas en su interior.

En cuanto a localizaciones de Phronima sedentaria fuera de España, la última que trascendió data de finales del pasado mes de noviembre en una playa de Irlanda. Alejándose en el tiempo, en internet hay imágenes de estos bichos en latitudes lejanas como el Golfo de México con la diferencia de que en su mayoría pertenecen a ejemplares captados en el transcurso de campañas de investigación o en prospecciones petrolíferas. Pero hasta ayer el protagonismo de este parasitoide en la red no alcanzaba ni mi mucho menos el tráfico viral que ganó impulsado por la publicación en exclusiva de este periódico.

Desde primera hora de la mañana y hasta la tarde, los auténticos protagonistas de esta información, Julio Alonso y su perra Mía; los biólogos del CSIC, Álvaro Roura y Manuel E.Garci; e Iñaki Ferreiro, instructor de Buceo Islas Cíes, acabaron atrapados en una vorágine de entrevistas a televisiones y radios. Lejos de agobiarse todos se declaraban "entusiasmados" por haber agrandado la fama de ese "octavo pasajero" que cuando vuelvan a ver la película de Ridley Scott identificarán para siempre como el "Alien de Samil".