Un joven se sentó ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 3 de Vigo acusado de un delito de falsificación de certificados por supuestamente elaborar justificantes médicos de ausencia alegando cuestiones de salud para faltar al trabajo. Concretamente, fueron tres los documentos que remitió por correo electrónico a la empresa en octubre y diciembre de 2016. El chico trabajaba para una ETT como operador en el sector de la telefonía. La Fiscalía pide que sea condenado a 900 euros de multa, mientras que el abogado defensor solicita la libre absolución al estimar que en la conducta de su cliente no se dan los requisitos del delito.
El joven optó por no contestar a una de las preguntas que le realizó el fiscal, la de si fue él quien envió por correo electrónico los justificantes falseados en los que se alegaban razones de enfermedad para no ir al trabajo. Ante esto, se leyó la declaración que prestó en Instrucción, donde sí admitió que había creado esos documentos, imitando lo mejor que pudo ese tipo de justificantes, y los remitió a la ETT ya que estaba agobiado por el estrés del trabajo y problemas personales. Un responsable de la empresa declaró que los partes les hicieron "sospechar" y los enviaron a la inspección médica. Añadió que ya tuvieron casos de otros trabajadores que también hicieron este tipo de falsificaciones.
La defensa hizo hincapié en que los partes aportados en la causa no son los originales, sino impresiones de los correos electrónicos remitidos a la empresa, por lo que los impugnó, pero la acusación respondió que en realidad lo que se falseó fue el "documento digital", el mismo que se envió por e-mail.
