El propietario de un club de alterne de la ciudad deberá pagar una multa de 2.160 euros por un delito contra los derechos de los trabajadores al emplear en su establecimiento a siete ciudadanas extranjeras que carecían de autorización para poder trabajar en España.

El juicio se resolvió ayer por conformidad en el Juzgado de lo Penal 1 tras quedar demostrados los hechos. Durante los años 2016, 2017 y 2018, Inspección de Trabajo de la Seguridad Social de Pontevedra y la Brigada Local de Extranjería y Fronteras realizaron visitas conjuntas al local durante las que pudieron constatar la ocupación laboral sin permiso. Las mujeres son de nacionalidad colombiana, brasileña y uruguaya, y sobre una de ellas se acordó su expulsión del país.