La sección 5 de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha estimado parcialmente el recurso interpuesto por Pedro Larrauri, el médico condenado por el Juzgado de lo Penal nº 3 de Vigo por el caso de la joven Desirée Vila, la gimnasta acrobática de élite a la que le tuvieron que amputar la pierna derecha tras un accidente deportivo.

El Juzgado de lo Penal nº 3 le había impuesto inicialmente dos años de cárcel y otros cuatro de inhabilitación para el ejercicio de la profesión médica. Sin embargo, la Audiencia revoca su condena como autor de un delito de lesiones por imprudencia grave y sustituye este ilícito por el de lesiones por imprudencia menos grave. “En resumen, pese a coincidir con la instancia en que de los hechos surge una imprudencia penalmente relevante, desde el momento en que cabe diferenciar entre grave y menos grave, dado el contenido de la reforma debía analizarse en cual de los dos nuevos tipos encajaba la conducta. Y en ese análisis entendemos que procede inclinarse por la imprudencia menos grave”, reza la sentencia.

Por este motivo, cambia las anteriores penas por la de 10 meses de multa a razón de 30 euros al día, es decir, un total de 9.000 euros. El tribunal ha tenido en cuenta, por ser más favorable para el acusado, la reforma del artículo 152 del Código Penal, que entró en vigor poco después de suceder los hechos y que introdujo una diferenciación entre delitos de lesiones por imprudencias graves y menos graves.

La clasificación anterior al cambio solo diferenciaba entre las lesiones causadas por imprudencias graves y leves. “Concluimos que se produciría ese efecto más favorable para el reo al entender que la conducta imputada, si hay que diferenciar entre imprudencias graves y menos graves, merece la consideración de menos grave”, señala la Audiencia.

Los magistrados destacan que el acusado tuvo que haber realizado pruebas diagnósticas “antes del momento en el que se hicieron”, por lo que coincide con la sentencia de instancia en que de los hechos surge “una imprudencia penalmente relevante”. No obstante, argumentan que “desde el momento en que cabe diferenciar entre la grave y la menos grave, dado el contenido de la reforma, debería analizarse en cuál de los dos nuevos tipos encajaba la conducta del sospechoso” y concluyen que debe situarse en la menos grave. Por ello, han procedido a la imposición de la única pena prevista legalmente para ese supuesto que es la de multa, pues la nueva regulación no incluye condenas de inhabilitación profesional.

Así, señalan que para un médico no experto en problemas vasculares podía existir “cierta dificultad en la ponderación de la urgencia de las actuaciones”. Por otro lado, argumentan que hay constancia de que el facultativo “no abandonó a la paciente ni su evolución” y que “adoptó algunas medidas de control, pese a que, lamentablemente, después no actuó en consecuencia”. La Audiencia también sostiene que tanto el retraso en la práctica de la primera prueba de imagen como el traslado a otro hospital “non respondió en exclusiva a decisiones de su ámbito”.

“Esto no niega la relevancia penal del hecho de no haber actuado de otra forma que acelerara esas actuaciones, pero sí son elementos a atender en la ponderación”, asegura el tribunal.

La sala viguesa estima también parcialmente los recursos del facultativo, de la clínica El Castro y de la aseguradora, lo que modifica las indemnizaciones inicialmente fijadas, que se reducen. La cuantía inicial era de más de 2,1 millones, si bien el tribunal hace modificaciones en las cuantías referentes a las prótesis, el perjuicio estético, las secuelas y la pérdida de calidad de vida: por prejuicio estético, era de 111.149, y la ha fijado en 51.061 euros. Respecto a la indemnización por las secuelas, la ha establecido en 147.356 euros, frente a los 176.954 de la sentencia de primera instancia. El Juzgado de lo Penal número 3 situó en 100.000 euros la cuantía por pérdida de calidad de vida, mientras que la Audiencia la ha fijado en 50.000 euros.

Además elimina algunas cuantías establecidas en la sentencia de lo Penal, revocando por ejemplo el pago de cualquier cantidad por daño moral complementario o por gastos sanitarios futuros.

Desirée Vila, la gimnasta viguesa que sufrió la amputación de su pierna derecha a causa de un accidente deportivo, conquistó recientemente a la audiencia de La Resistencia. Vila exhibió su vitalidad y sentido del humor en el programa que presenta David Broncano, uno de los espacios de moda de la televisión.