El proyecto municipal de transformar la zona de Chouzo en un campus educativo y erigir un nuevo edificio para la Biblioteca del Estado por la que Vigo lleva una década esperando podría vivir esta semana su impulso definitivo. Un grupo de técnicos del Ministerio de Educación y Cultura se trasladarán mañana por la mañana a la ciudad para conocer a fondo la propuesta. Desde el gobierno local confirmaron en las últimas horas que se trasladarán directamente a la trasera de la calle Lalín para valorar los terrenos expropiados en su día por el Concello para la Ciudad de la Justicia y comprobar si son adecuados. También está previsto que se reúnan con personal de la Gerencia de Urbanismo para que les expliquen el trámite necesario para cambiar la calificación del suelo y establecer su uso dotacional. Esta modificación podría requerir una media de nueve meses, tiempo que en paralelo se podría emplear en Madrid para avanzar en la redacción del proyecto constructivo.

"Esto es exactamente lo que el ministro y yo hablamos en nuestra reunión. Le hice una propuesta, le pareció bien y ahora vienen a estudiarla en detalle. Cumplen con su compromiso", destacó ayer el alcalde, Abel Caballero, horas antes de que se produzca esa visita en base a la cual los técnicos estatales realizarán un informe que confirme o no la viabilidad de la propuesta del Concello.

En el gobierno local son optimistas, confían en que Vigo contará finalmente con este equipamiento y explican que la actuación se financiaría con remanentes, lo que explica que no figure ninguna partida específica en los presupuestos del Gobierno para 2019. Lo que lamenta el regidor son los "obstáculos" que, a su juicio, ha puesto la Xunta a esta actuación al ofrecer Alberto Núñez Feijóo al ministro José Guirao los actuales edificios de juzgados de la calle Lalín para la biblioteca estatal. El Concello rechaza esta alternativa por considerar que no se adapta a las necesidades de la infraestructura y porque plantea en un futuro dedicar estos inmuebles a reubicar el colegio Altamar y a completar la zona con un "ágora cultural".

En concreto, Caballero explicó al ministro su intención de que se construya un edificio de nueva planta "singular" y firmado por un arquitecto de renombre como se ha hecho en otras ciudades. La propuesta sería la de una biblioteca de 6.000 m2 rodeada por una amplia zona verde y cuyo presupuesto estimado podría rondar los 15 millones de euros. El regidor lo considera la opción más idónea y ágil, ya que la autonómica implicaría esperar hasta el vaciado de los edificios judiciales para iniciar el proyecto que ya ha sufrido importantes retrasos víctima de los recortes presupuestarios de Madrid y de la falta de terrenos disponibles.