Vigo ostenta un curioso honor en la geografía española: es, de lejos, la ciudad que acoge un mayor número de vecinos que su capital de provincia. Los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran que a comienzos de 2018 había empadronados en la ciudad 293.642 habitantes frente a los 82.802 de Pontevedra. Entre ambas urbes habría así un amplio margen de más de 210.800 personas. Solo un año antes esa distancia era algo menor. En concreto, sumaba medio millar menos de habitantes. A lo largo de 2017 tanto la urbe del Lérez como la olívica ganaron población en una medida muy similar -0,15% la primera y 0,22% la segunda-, pero esa evolución sirvió a Vigo para ensanchar todavía más su distancia con la capital de provincia. En enero de 2018 Vigo multiplicaba por 3,5 el padrón de Pontevedra.

El caso de Vigo no es único en España, aunque sí es el más evidente. Otros puntos del país, como Asturias o Andalucía, registran casos similares. En tierras del Principado, Gijón supera en población a la capital de la provincia y comunidad autónoma: Oviedo. Según las tablas del INE, la primera ciudad arrancó el año pasado con 271.843 residentes frente a los 220.020 de la capital ovetense. Otro caso se registra en el sur de la Península Ibérica, en tierras andaluzas. Allí el INE identificaba en 2018 que en Cádiz, capital de la provincia homónima, residían 116.979 vecinos. Algo más al norte, a escasa media hora en coche, está Jérez de la Frontera, un municipio que supera en población a su capital de provincia. El año pasado el observatorio estadístico registraba en la urbe 212.879 habitantes, casi el doble que en Cádiz.

Prueba del caso excepcional de Pontevedra es que Vigo supera en número de vecinos a 37 capitales de provincia de España. Con más de 293.600 residentes solo la superan en padrón las grandes metrópolis del país: Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Málaga, Murcia, Palma, Las Palmas, Bilbao, Alicante, Córdoba y Valladolid. La urbe olívica suma más población que Teruel, Soria, Segovia, Huesca y Cuenca juntas, todas capitales de sus respectivas provincias.

En tierras gallegas no se encuentra tampoco un caso equiparable al de Pontevedra y Vigo. En A Coruña la urbe herculina detenta la capitalidad provincial con 244.850 vecinos, muy por encima de la segunda ciudad más populosa de la provincia: Santiago de Compostela, que con 96.405 residentes actúa como capital de toda la comunidad autónoma. En Ourense ocurre algo similar. La urbe de las Burgas suma 105.505 residentes, muy por encima del segundo municipio más habitado: Carballiño, que el año pasado acogía a poco menos de 14.000 empadronados. En Lugo la capital alcanzaba por esas mismas fechas 98.000 vecinos, lo que la situaba muy por delante del otro municipio más poblado: Monforte de Lemos, que se quedaba en cerca de 18.600 vecinos.

En toda la geografía española no hay ninguna ciudad que sea la segunda más poblada de su provincia y aventaje en habitantes a Vigo. En Madrid, por ejemplo, la segunda urbe con mayor volumen de habitantes es Móstoles, que en 2018 rondaba los 207.100 residentes. En Barcelona el consistorio más habitado después de la Ciudad Condal es Hospitalet de Llobregat, con 261.100 vecinos; y en Valencia, Torrent, con 81.200.

El aumento de población en Vigo entre 2017 y 2018 se explica por varios factores. Uno de los principales es el empuje de Navia, que a lo largo de los últimos años ha disparado su natalidad y actuado como motor demográfico de la ciudad. Con 9.400 residentes, registró un repunte de población del 27% en apenas un lustro.