El incremento de 65 plazas en los cinco centros gestionados en Vigo por la Asociación Galega San Francisco (Agasfra) unido a la inversión anual de la Xunta de 2,5 millones de euros (un 15% más que hace una década) hacen que la organización ofrezca un "servicio de calidad". Lo aseguró ayer su presidente, Eladio Fernández, durante la visita a las instalaciones de la conselleira de Política Social, Fabiola García, que destacó la importancia del presupuesto de 66 millones de euros que la Xunta tiene programado para 2019 con el objetivo de "consolidar la red de plazas públicas de atención a la discapacidad". Al acto también acudieron la presidenta del PP de Vigo, Elena Muñoz, y el director xeral de mayores y personas con discapacidad, Ildefonso de la Campa.

"Hay que alcanzar una Galicia más inclusiva e integradora y apostar como lo hace Agasfra cada día por un trabajo personalizado y profesionalizado para todas las personas con discapacidad para que así alcancen una autonomía personal", afirmó García a su llegada a uno de los centros de la asociación (que cuenta con 159 plazas públicas) ubicado en la calle Cangas. Tras un recorrido por el edificio (gimnasio, comedor y aulas de actividades) e interactuar con los usuarios, la conselleira se reunió con familiares de estas personas y les transmitió que la Xunta "tiene prevista una inversión en discapacidad en toda la comunidad de 106 millones de euros, un 63% más que en 2009". "El objetivo es que Galicia sea el mejor lugar para crecer, vivir y hacerse mayor. El presupuesto se orientará a consolidar las plazas públicas existentes y a crear nuevas", apuntó.

Sobre la política social del Concello, la conselleira pidió a Caballero que "apueste por los servicios públicos y sociales a favor de las personas mayores y con discapacidad de Vigo" y apuntó que "nunca es suficiente el dinero dedicado a esta materia porque cada día hay más demandas". Por su parte, el presidente de Agasfra agradeció el aumento de plazas (25 para el servicio de atención residencial terapéutica, 25 para el centro ocupacional y 15 para el centro de día) y de la inversión, ya que reconoció que eso hizo posible tener un profesional para cada centro, en lugar de uno que atienda a varios.

A su vez, Fernández aprovechó para manifestar que su entidad es "un referente en discapacidad en Galicia" y puso el foco sobre problemas pendientes como "el incremento salarial del personal y el concierto social para que el servicio sea más cercano y terminar así con el mercadeo de plazas".