La visita del Standard de Lieja a Vigo en noviembre de 2016, para disputar un partido con el Celta de Vigo que finalizó en empate, dejó también una larga lista de disturbios protagonizados por hinchas belgas, como agresiones, peleas y rotura de mobiliario urbano. Uno de los incidentes llegó a juicio y, el pasado año, un aficionado de Bélgica fue condenado por el Juzgado de lo Penal número 2 de Vigo al pago de una multa por delito de resistencia a agentes de la autoridad. Pero el sentenciado presentó un recurso de apelación y la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en la ciudad olívica, le ha dado la razón y lo absuelve.

Los hechos ocurrieron cuando aficionados belgas que iban por la calle Pi y Margall hacia Balaídos lanzaron vasos y botellas al dispositivo policial y a la vía pública. Cuando un agente iba a identificar al ahora absuelto, lo sujetó para detenerlo y el hincha, que estaba en estado de embriaguez, le lanzó un puñetazo. El policía, que no sufrió lesiones por llevar chaleco protector, pudo reducirlo. Frente a la condena impuesta por la jueza de lo Penal, la Audiencia exculpa al joven porque el golpe fue un hecho aislado sin intensidad. La conducta sería constitutiva de una falta que fue derogada, por lo que ya no tiene castigo penal.