Medida de urgencia para frenar el deterioro de la terminal de cruceros de Vigo. El Puerto acaba de sacar a licitación un proyecto para la reparación del paramento del muelle, que con el paso del tiempo, la intensidad del tráfico marítimo y el tamaño cada vez mayor de los buques -la mayoría, grandes transatlánticos- ha perdido muchos de sus bloques de piedra, dejando al descubierto el "núcleo" de la plataforma. Se trata de una obra que pese a su cuantía -el presupuesto estimado es de 95.000 euros- es de vital importancia para la conservación de la zona, ya que hace al menos quince años que no se realizan trabajos de mantenimiento en los muros de mampostería.

Los efectos del tiempo, las mareas y la salinidad del mar son visibles en la parte seca de los muros, pero más en la sumergida. Fuentes consultadas por este periódico explican que la voz de alarma saltó hace aproximadamente un año, durante una revisión submarina de los muelles en los que suelen atracar los grandes cruceros que visitan Vigo cada año -solo este año hubo 65 escalas entre enero y noviembre-. En esa misión se descubrió la zona sumergida de los muelles sufre un considerable deterioro en parte por la presión que sufre con los transatlánticos que amarran en la terminal viguesa, y que utilizan hélices azimutales en las maniobras de atraque y desatraque que podrían estar acelerando la degradación de los muros (por la presión que ejercen con el agua).

Dicha "degradación", apunta la Autoridad Portuaria en el informe de la licitación, afecta a los bloques de mampostería que conforman la parte expuesta del muelle, algunos de los cuales incluso han desaparecido, dejando expuesto el núcleo del muelle. "Esa exposición, junto con el trabajo continuo del oleaje y de la acción de las hélices de los transatlánticos y barcos de apoyo, hacen que el núcleo del muelle se degrade y pierda parte de los finos que le confieren estabilidad y durabilidad", recoge el informe. Y ante esta preocupante situación, el Puerto ha decidido actuar y reparar el paramento de los muelles que circundan toda la terminal.

El proyecto incluirá trabajos de limpieza previa, ferrallados y encofrados -en aquellos puntos más afectados-, hormigonado con compuestos de alta resistencia y adaptados al ambiente marino; desencofrado y limpieza final. Las empresas interesadas tienen hasta el próximo 23 de enero para presentar oferta y el ganador, tres meses para ejecutar las obras, que tendrán que realizarse de forma coordinada para permitir los atraques de cruceros -el primero está previsto ya para el próximo 5 de enero, el Queen Elizabeth, de la naviera Cunard-, e incluyen trabajos submarinos.

Al desgaste de los cruceros hay que sumar el de las embarcaciones de los Prácticos y el de los buques oceanográficos que han establecido su base de operaciones en la terminal. El presupuesto estimado para la obra es de 95.907 euros con IVA, el grueso de los cuales son para los encofrados (25.320 euros), hormigonados (19.565) y trabajos previos (11.782). El departamento que preside Enrique López Veiga apunta que el muelle de trasatlánticos es uno de los que más tráfico soporta de toda la fachada marítima del Puerto, y que las características de estos tráficos, crecientes de manera continua tanto en frecuencia como en tamaño y potencia, hacen que este muelle se vea sometido a esfuerzos cada vez mayores.

Praza da Estrela también prevé arreglar otras dársenas del entorno portuario, como aseguró López Veiga tras la caída del paseo de As Avenidas durante el concierto de cierre del festival de O Marisquiño. El suceso dio pie a asociaciones como los armadores (Arvi) para criticar el mal estado de algunos muelles portuarios, a lo que López Veiga respondió recordando los proyectos de reparación ya en marcha.