Treinta segundos que valen oro y corren como la pólvora por las redes sociales. El vídeo de medio minuto que muestra cómo el alcalde se arrancaba el sábado a hablar en inglés para anunciar el tema "Happy Christmas" de John Lennon se convirtió, en cuestión de horas, en un auténtico fenómeno viral que arrasó en Twitter y Facebook. Solo en el perfil de dos diarios estatales en esta última red social acumuló cerca de 60.900 reproducciones en poco más de 24 horas, un éxito que engruesan las miles de visualizaciones registradas a través de perfiles y cuentas de todo tipo que compartieron la grabación. Una de ellas sumaba ayer, por ejemplo, 276.000 reproducciones del vídeo. Todos esos espectadores escucharon dos palabras que se repetían: Vigo y Navidad.

A la espera de comprobar su alcance global y retorno económico, las luces de Navidad de Vigo se han convertido ya en uno de los temas más comentados en Galicia y buena parte de España. Ayer por la mañana el alcalde intervenía de hecho en una televisión estatal para hablar sobre el alumbrado, el despliegue de color e iluminación en la ciudad y la fiesta del sábado.

"Desde el punto de vista de la visibilidad de la marca es un campañón; el encendido de las luces de Vigo ha trascendido las fronteras de la ciudad y Galicia", reconocen desde Bap&Conde, la popular agencia de publicidad que desarrolló, entre otras, la campaña "Vivamos como galegos" de Gadis. Una de sus expertas apunta que gran parte del éxito se debe a la viralidad que logró en Internet. Además de los medios, fueron los propios usuarios quienes se encargaron de compartir de forma masiva el vídeo de 30 segundos de Abel Caballero en Porta do Sol.

Gran parte de ese impacto -apuntan desde Bap&Conde- puede explicarse por el clima generado desde el Concello. Durante semanas el alcalde incidió en el despliegue del alumbrado y "alimentó" las expectativas. Para no arruinar ese efecto, de hecho, el Ayuntamiento optó por no hacer pruebas de iluminación el viernes. Aunque así aumentaba el desafío del directo, desde Praza do Rei se quería evitar a toda costa que la imagen del árbol de Porta do Sol encendido llegase antes de tiempo a las redes sociales.

"En publicidad, por ejemplo, se usa muchas veces la fase teaser, que es previa al lanzamiento y genera expectativas", apunta la agencia. En el caso de Vigo esa "precampaña" puede remontarse incluso a mediados de septiembre, cuando Caballero protagonizó otro vídeo viral en el que garantizaba que la ciudad viviría las "navidades top de este planeta". En aquella ocasión la grabación se compartió también miles de veces en las redes. "La viralidad es difícil de predecir, pero desde ese primer vídeo se dio el pistoletazo de salida, reflexiona Mabel Míguez, profesora del Departamento de Comunicación Audiovisual e Publicidade de la Universidade de Vigo.

"Se generó una altísima notoriedad. La repercusión que se ha alcanzado a nivel nacional es muy relevante", añade Míguez, quien insiste en que la repercusión alcanzada para promocionar la Navidad olívica es "innegable". "Vigo es una ciudad mucho más conocida ahora que antes, con una visibilidad y notoriedad muy positivas", abunda.

En lo que coinciden los expertos consultados por FARO es en lo costoso que sería lanzar una campaña publicitaria por los medios convencionales -anuncios en prensa, radio y tv, vallas, promociones...- para alcanzar el mismo impacto. "En Madrid también se estrenó la nueva Gran Vía con las luces de Navidad pero en Vigo tuvieron más ruido", señalan desde la agencia.

Una de las claves del vídeo de 30 segundos es que las decenas de miles de personas que lo han visto se han quedado con una imagen de la Navidad olívica. La grabación muestra un plano general en el que se ve el gran árbol iluminado de Porta do Sol, justo al lado del Sireno, y el alumbrado que se despliega hacia las calles Príncipe y Elduayen.

En cuestión de unos años Vigo ha conseguido que la ciudad empiece a asociarse a un nuevo reclamo, que se suma a otros ya consolidados, como la Reconquista, su gastronomía, las playas o su atractivo más popular entre los turistas -las Islas Cíes-. Parte de ese fenómeno se debe al despliegue de la decoración. Otra, a su impacto en redes y medios.