Para el Tribunal Supremo la custodia compartida no debe ser la excepción. Al contrario, tendría que convertirse en lo "normal" y "deseable". Si bien es cierto que este régimen de convivencia entre padres separados e hijos menores aún no es el habitual, ha dejado de ser algo extraordinario. Poco a poco, cada vez son más los matrimonios que, tras poner fin a su relación, se reparten por igual el cuidado de los niños que tienen en común. Desde 2010 los casos en los que los magistrados aplican este modelo de custodia en Vigo y el resto de la provincia de Pontevedra. Aquel año se concedió en 86 casos, que apenas representaban el 7% de las separaciones y divorcios de parejas con hijos menores a su cargo registradas en ese período. Pasado el tiempo, esta cifra ha crecido de forma notable. Y es que en 2017 los jueces acordaron este sistema en casi el 20% de las rupturas: en números totales fueron 173 casos.
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La Audiencia dictamina que la custodia compartida es "enriquecedora" para los hijos
Una reciente sentencia de la Sección Sexta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, la sala civil que resuelve en Vigo todos los recursos de apelación en materia de Familia, acierta al definir la custodia compartida como un "desiderátum". O lo que es lo mismo, esa es la aspiración. Pero, como también se advierte en ese fallo, "no siempre concurren las circunstancias ideales para su adopción". Y, además, a la hora de concederla o no hay una "condición insoslayable": debe primar "el interés del menor". El régimen de convivencia por el que se opte debe de ser el mejor para el niño. Por eso, pese a esa jurisprudencia favorable a la custodia compartida que fue consolidando el Supremo y que ha sido acogida por juzgados de Familia y audiencias provinciales, todavía son muchos los casos en los que se deniega esta pretensión.
Los últimos datos que permiten analizar la situación son de 2017. Ese año hubo 2.005 divorcios y separaciones en toda la provincia de Pontevedra. Y de esas rupturas, en 989 de ellas los excónyuges tenían hijos menores. La custodia compartida se adoptó en 173 de esos casos. El 18% del total. Este régimen ha ganado puestos con respecto a hace años. Pero la custodia monoparental para la madre continúa a la cabeza, al aplicarse en 730 sentencias, prácticamente el 74%. A favor del padre se concedió en 84 casos, el 8%.
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"Si se dan las circunstancias la custodia compartida es lo mejor; y lo que se percibe es que la gente es cada vez más favorable a este régimen", explican fuentes judiciales, que señalan que las peticiones aumentaron de forma muy importante en los últimos años. Los casos más claros son en los que hay mutuo acuerdo, es decir, que cuentan con la conformidad de ambos progenitores. Pero aún existiendo la oposición de uno de los excónyuges, cada vez son más las sentencias en las que, si es favorable para el menor, se opta por este sistema.
Los criterios que se suelen valorar para conceder una custodia compartida es que haya una "real implicación" de ambos padres en el cuidado de su hijo, que no exista rechazo del niño hacia el progenitor que solicita este régimen, que los domicilios de la expareja se encuentren relativamente próximos para facilitar los cambios semanales o mensuales de casa del menor y que no haya una "conflictividad extrema" entre el antiguo matrimonio que trascienda a la relación con el niño y que por tanto haga inviable este tipo de custodia.
