Los promotores y el arquitecto son optimistas y confían en relanzar de forma definitiva en pocos meses la rehabilitación del edificio Ribas y la urbanización planteada en el solar anexo y que está a punto de cumplir dos décadas de paralización debido a la presencia de unas salinas que la Dirección Xeral de Patrimonio ordenó conservar in situ y musealizar para que puedan ser visitables. La primera licencia de obra se otorgó en julio del año 2000, pero cambios en la propiedad, dificultades financieras y la necesidad de reajustar el proyecto para salvaguardar los restos hicieron hasta ahora imposible desbloquear esta importantísima actuación en Marqués de Valladares. Actualmente el proyecto está en manos de Espacia Avante SL, a la que está vinculada el empresario Manuel Jove. La Dirección Xeral de Patrimonio autorizó la segunda y definitiva fase de las catas y el arquitecto Jesús Irisarri confía en que se pueda completar el estudio arqueológico en el plazo de dos meses y recibir luego autorización para solicitar licencia de obra. "Queda por analizar un trozo muy delimitado y somos optimistas. Confiamos en que a principios de año se pueda liberar definitivamente este proyecto", explicaba en las últimas horas en alusión a la actuación conjunta para los números 39 y 41, actualmente vacíos, y el 43, correspondiente al edificio Ribas. El estudio Irisarri & Piñera plantea un bloque unitario para 39 viviendas, locales comerciales y 70 garajes. El proyecto básico incluye la musealización de las salinas con la cesión de 227 m2 al Concello y la creación e un patio para los residentes. Con él conectará el bloque rehabilitado hacia Plaza de Compostela.
