El secretario general de la federación de servicios de UGT en Pontevedra, Santos García, en una comparecencia en la que también estuvieron presentes trabajadores de la zona azul, aseguró que el plan de la empresa concesionaria es llegar a los quince despidos. Los empleados llevan 84 días en huelga porque Dornier prescindió de 8 compañeros, y ahora temen que se lleve a cabo su plan inicial y se sumen 7 nuevos ceses. "No estamos pidiendo un aumento de sueldo ni el fin de la concesión, sino que se readmitan a los compañeros y volver a la situación anterior", afirmó Santos García.
Los empleados insistieron en el incumplimiento de los pliegos de las condiciones en que incurrió la concesionaria. "En los pliegos se especificaba que son cuarenta empleados para atender las más de 2.000 plazas de zona azul. Han despedido ya a ocho y quieren llegar hasta los quince despidos", denunció el representante de UGT. Considera que los trabajadores que han ido a declarar al Concello para el expediente que el gobierno local ha abierto a la concesionaria están condenados, pues Dornier conoce sus nombres y "no permitirán que vuelvan a trabajar". Santos insistió en que "el Ayuntamiento nos ha engañado, nos ha dicho que se iba a sancionar a la empresa", y que la situación se ha convertido en un "problema político".
Parte de la plantilla mantiene su encierro en la sede de Dornier, donde llevan desde el martes en huelga de hambre. Un médico ya los ha visitado esta semana para comprobar su estado de salud.
