Las protestas ciudadanas en Francia por la subida de impuestos a los carburantes, sobre todo al diésel, están dejando un reguero de incidencias en la industria de automoción, y el polo vigués no es una excepción. El bloqueo a los camiones en la frontera y en los principales parques industriales del país vecino por el movimiento conocido como los "chalecos amarillos" está provocando retrasos en las entregas de mercancías de más de 24 horas y ha obligado a los fabricantes de coches y componentes a optar por alternativas como el transporte marítimo y el aéreo. Eso, en el mejor de los casos.
En la comarca de Vigo, la acción de los "chalecos amarillos" empieza a notarse en la propia cabecera del sector, la planta de Balaídos del Grupo PSA, que ayer tuvo que suspender el turno de tarde en el Sistema 1 (sedanes C-Elysée y 301) por la falta de motores (la producción se traslada a hoy), pero también en proveedores instalados en Galicia y del norte de Portugal que suministran a PSA y a otros OEM en Francia, Alemania, Reino Unido y Europa del Este, según ha podido confirmar este periódico. Es el caso, por ejemplo, de la fábrica de sistemas de climatización y aire acondicionado de la multinacional japonesa Denso en Valladares, que ha suspendido producción por las noches al no haber retorno de contenedores vacíos, o de MCSyncro, entre otros.
Los problemas de suministro han vuelto a dejar estampas de gran actividad en Peinador, donde en las últimas 48 horas han operado hasta seis aviones de transporte (en la imagen que acompaña a esta información puede verse uno de los Antonov en pista) de mercancías para cargar componentes con destino a Francia, Reino Unido y Alemania.
Asociaciones de transportistas han estimado que hay centenares de camiones retenidos en La Junquera e Irún. Otro punto caliente está siendo Burdeos. En Francia, la planta del Grupo PSA en Sochaux, donde se fabrican modelos superventas como los Peugeot 3008 y 308, ha visto interrumpida por completa su producción por la acción de los "chalecos amarillos".
Este bloqueo ha llevado incluso al Ministerio de Asuntos Exteriores a condenar las acciones de los manifestantes. Madrid ha emplazado al Estado francés a que adopte "todas las medidas oportunas para garantizar con total seguridad la libre circulación de mercancías". Según la patronal de los transportistas, estas movilizaciones limitan la circulación de cerca de 20.000 camiones cada día. El pasado martes, el poste fronterizo de Irún en el País Vasco español, en el extremo oeste de frontera con Francia, se cerró a la circulación de vehículos pesados durante varias horas, provocando retenciones de hasta 13 kilómetros.
