"Es un dragado ecológico, con un pretratamiento de lo que se va a extraer en las tres zonas muy ambicioso, de ahí la potente maquinaria de la planta donde se realizará este proceso en el muelle Transversal". A punto de arrancar la actuación que adjudicada por el Puerto en 1,1 millones acabará con las limitaciones de atraque en la terminal Ro-Ro, el muelle de Reparaciones y el de Cruceros, el jefe de Planificación e Infraestructuras recalca con esa explicación inicial que "no es solo poner la cuchara a andar". Asegura que la tramitación previa al concurso, con una caracterización del lecho marino en colaboración con el CEDEX (Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas) -dependiente del Ministerio de Fomento- como su ejecución "han sido y será muy exigentes y cuidadosa con el medio". La colmatación de sedimentos a causa del intenso tráfico y la actividad industrial rebajaron la profundidad en las tres áreas de las que se prevé extraer 13.000 m3 de material compacto. Este será el resultado de la actividad en la miniplanta montada en el Transversal. Escolar la describe así: "Primero el material retirado se criba, separándose las fracciones gruesas, como arenas o grabas, y luego, la parte más fina, lodos o fangos, se pasan por un filtro prensa para quitarle la máxima cantidad de agua posible. De esta manera consigues una especie de paquetes o tortas de material seco que son los que luego se transportarán hasta el gestor autorizado", describe Escolar.