El Juzgado de lo Mercantil de Vigo ha estimado la demanda presentada por una viajera contra Ryanair y condena a la compañía aérea a que le abone 250 euros por un retraso superior a las tres horas de un vuelo que hacía la ruta Santiago de Compostela-Barcelona.

Los hechos ocurrieron el 22 de septiembre de 2017. La aerolínea se opuso a la demanda, alegando "circunstancias extraordinarias ajenas al transportista" que impidieron la salida del vuelo en hora, concretamente "mala climatología". Sin embargo, el magistrado estima que esta alegación "no se concreta suficientemente" con la documental aportada.