Isaac Fernández y Samuel Molanes, dos jóvenes vigueses, son los primeros españoles con síndrome de Down que realizan sus prácticas laborales en el extranjero. Ambos ya se han reincorporado a sus clases habituales del servicio de formación tras una experiencia de tres semanas en el Hotel Meliá Milano, un cinco estrellas de la ciudad italiana. Y no solo han regresado con una experiencia de gran valor para su futuro, sino también con un álbum que incluye instantáneas con jugadores del Barcelona como Messi o Denis Suárez, que posaron con ellos horas antes del partido de Champions contra el Inter.

Esta experiencia pionera en todo el país se desarrolló dentro del programa europeo Valuable Network. Isaac y Samuel ocuparon los puestos de ayudante de cocina y camarero, respectivamente, y estuvieron acompañados durante toda la estancia por Eva Alonso, su preparadora laboral y responsable del área de Empleo en Down Vigo. Ella desempeñó tareas de apoyo en sus respectivos trabajos y reforzó las labores de traducción.

La posibilidad de desarrollar prácticas laborales en el extranjero supone una oportunidad no solo de mejorar la preparación de jóvenes con síndrome de Down para acceder a un empleo, sino también "un aprendizaje vital" que aumenta su nivel de autonomía y fomenta su desarrollo personal como parte activa de la sociedad.

Durante su estancia, Isaac, Samuel y su preparadora se alojaron en un apartamento próximo al hotel, de forma que también disfrutaron de una experiencia de vida independiente. Visitaron lugares turísticos e incluso pudieron fotografiarse con ídolos futbolísticos del Barcelona y del Betis.

Messi y el jugador de Salceda Denis Suárez, que se alojaban en el Hotel Milano, no dudaron en fotografiarse con los jóvenes vigueses horas antes del partido que les enfrentó al Inter la semana pasada.

Según explican desde Down Vigo, la experta Eva Alonso aplicó la metodología del empleo con apoyo, una modalidad de inserción laboral en la que el preparador acompaña al trabajador durante todo el proceso de prácticas.

Antes de viajar a Milán, tanto ella como Isaac y Samuel recibieron clases de italiano para adquirir unos conocimiento mínimos que les permitieran desempeñar su trabajo en otro idioma. Y ya en el hotel, la preparadora se dedicó a facilitar el aprendizaje y la adaptación al puesto de trabajo de ambos jóvenes, además de reforzar los apoyos de los encargados o compañeros dentro de la empresa.