La lluvia y los fuertes vientos que protagonizaron el día de ayer no derrotaron a las ganas de comer castañas y pasárselo bien de los vigueses. Y los magostos de Beade y O Berbés volvieron a ser protagonistas de uno de los grandes días del otoño, en la víspera de San Martiño. En Beade, desde las 19.00 horas, las personas que se acercaron a la fiesta degustaron las castañas asadas y disfrutaron de la actuación de las cantareiras Volta do Demo. Previamente hicieron un recorrido por la parroquia con el Cometa, el histórico autobús de Vitrasa. En O Berbés, la federación de peñas recreativas El Olivo celebró su tradicional magosto y a primera hora de la tarde comenzaron la preparación de las castañas. La música también fue protagonista con la actuación del grupo Xuntanza. El alcalde Abel Caballero participó en ambas fiestas, donde saludó a los vecinos.

Por otra parte, la borrasca Beatriz volvió a dejar su huella en la ciudad olívica por segundo día consecutivo. La pasada madrugada los bomberos tuvieron que realizar una docena de intervenciones, algunas de ellas afectaron a parte de la iluminación navideña de la ciudad, que sufrió varios daños. Los vientos, que llegaron a alcanzar los 83 kilómetros por hora, provocaron riesgos de desprendimientos en Navia, y las avenidas de Camelias, Castelao y Elduayen.

Respecto a la iluminación navideña, Caballero avanzó este sábado que habrá un belén de estilo veneciano mayor que el del año pasado en la Casa das Artes. En la Casa da Cultura se colocará un poblado navideño, en Concepción Arenal un muñeco de nieve de 10 metros de altura y en la calle Compostela un árbol de Navidad gigante.