Antes de dar luz verde a las licencias de derribo, los técnicos del Concello deberán analizar el proyecto planteado por la promotora de la obra. No es sin embargo la primera vez que se plantea demoler las construcciones más deterioradas del Barrio do Cura. Hace casi una década, en 2010, el anterior propietario de los inmuebles, la empresa Valery Karpin Asociados Inmobiliarios SL, ya solicitó en la Gerencia de Urbanismo licencia de derribo. Entonces se redactó un proyecto de derribo que se modificó a lo largo de su tramitación. En los informes se reseñaba también el deterioro y ruina de las edificaciones.

A finales de noviembre de ese mismo año un informe técnico de la Gerencia de Urbanismo concluía que las construcciones podían ser derribadas. Los inmuebles incluidos en aquel plan se recogen ahora también en el nuevo que acaban de presentar los actuales propietarios, con el agravante de que a lo largo de los últimos ocho años su mal estado ha ido empeorando. "Estas edificaciones se han deteriorado aún más de lo que estaban por la acción continuada de la climatología, la vegetación y la ocupación ocasional, por lo que la situación de ruina se ha visto agravada desde entonces", zanja el proyecto que acaba de entregar la actual promotora de la actuación.

A mediados de septiembre el Concello inició las gestiones del convenio para la reurbanización y edificación del entorno. Poco después Urbanismo tramitaba además el acuerdo entre la administración municipal y la empresa Barrio do Cura S.L.U. para modificar el PXOM de 1993 y el Pepri Casco Vello en ese ámbito en concreto. Tras años de abandono, el futuro del barrio se despejó después de que Autonomy Global Opportunities asumiese las obligaciones de la sociedad de Karpin y la deuda con los bancos.