Apenas restan dos semanas para que Vigo encienda las luces de Navidad, una cita que ha ido ganando importancia en los últimos años hasta convertirse en una de las celebraciones estrella del año. Miles de personas acuden hasta la zona cero de la ciudad para presenciar como el árbol de más de 30 metros situado en Porta do Sol y los miles de elementos decorativos repartidos por buena parte de las calles de la urbe olívica se iluminan al mismo tiempo. El alumbrado permanecerá encendido desde el próximo sábado 24 de noviembre hasta después de la llegada de los Reyes Magos. Más de seis semanas en la que comerciantes y hosteleros hacen su particular "agosto". "La última Navidad fue histórica. Había miles de personas en las calles y los negocios nos beneficiamos mucho de ello. Para nosotros supone un impulso importantísimo y nos sirve para aumentar nuestra facturación en la época de peor meteorología", anota Itos Domínguez, presidenta de la Asociación de Comerciantes y Hosteleros Vigo Vello.
No son los únicos beneficiados del "tirón" que tiene el alumbrado. Los comercios notan un repunte de ventas, en parte por la campaña de Navidad y en parte por la llegada masiva de visitantes a la ciudad. "Es cierto que viene mucha gente de la comarca a pasar el día y ya aprovecha para realizar aquí sus compras", apunta Víctor Fernández, máximo mandatario de la Federación de Comerciantes de Vigo (Fecovi), que insiste en la repercusión que generan en el área las miles de luces repartidas por la urbe olívica. "Si le preguntas a los comerciantes de otros municipios te comentan que pierden clientes en favor de Vigo", apostilla.
El adelanto del encendido a noviembre es aplaudido en el sector. "Estuvimos muchos años peleando porque se hiciese días antes del puente de diciembre porque para nosotros era importante. Hay que celebrar y agradecer la decisión del Concello en este sentido", señala Enrique Núñez, gerente de Centro Príncipe.
La puesta en marcha de la iluminación de Navidad llegará tan solo un día después de que se celebre el "Black Friday", una cita en la que los negocios ofrecen importantes descuentos. "Esperamos que este año el inicio de la campaña de invierno sea muy positivo y ojalá nos respete el tiempo para que la gente pueda salir a la calle", comenta Fernández.
Restaurantes llenos
Numerosos trabajadores recuperaron el año pasado las cenas y comidas de empresa antes de Navidad, una celebración que había quedado en el olvido en los años de la crisis y que este curso ya ha deparado un aluvión de reservas para el mes de diciembre. Muchos restaurantes y hoteles tienen sus salones reservados para los fines de semana del 14/16 y 21/23 de diciembre. "Se tienen que dar prisa porque apenas quedan huecos libres para esas fechas", asegura César Ballesteros, presidente de la Federación Provincial de Hostelería de Pontevedra (Feprohos). "Ya existen algunas reservas para finales de noviembre porque para diciembre es casi imposible. El invierno de 2017 supuso un punto de inflexión para la recuperación de estos eventos", añade Domínguez.
