El Ministerio de Fomento ha abierto la puerta al pago por el uso de las autovías. Su titular, José Luis Ábalos, apuntó ayer la necesidad de buscar una fórmula, "sea la que sea", para asegurar el mantenimiento de las autovías por su elevado coste para las arcas del Estado. Según precisó, estos viales cuestan al Ejecutivo 11.000 millones anuales. "Es la única infraestructura de transporte que se pretende que sea gratuita", anotó Ábalos.

Entre los cambios de la Ley de Carreteras que ayer recibieron luz verde del Consejo de Ministros hay uno que afecta directamente a los camioneros. La reforma abre la puerta a que "por razones de seguridad vial o mediaoambientales", y "en determinadas carreteras", el Gobierno pueda obligar a que los transportes pesados circulen por las autopistas. Desde el departamento de Ábalos avanzan, en cualquier caso, que la medida contemplará también "bonificaciones" para que las empresas puedan hacer frente a los peajes. El sector ya ha reclamado que en ese caso demanda la gratuidad total.