Atención Primaria se encuentran en una situación "muy complicada". A día de hoy, una de cada seis médicos de familia está ausente ya sea por baja, por vacaciones, días de libre disposición o por otros motivos. Los pocos sustitutos que hay se destinan a cubrir los turnos de las urgencias extrahospitalarias. Así que en los centros de salud, las ausencias se cubren entre los compañeros. Pero llevan tanto tiempo seguido haciéndolo que hay un importante "desgaste" y al Sergas le está costando encontrar doctores que quieran o puedan prolongar su jornada. Así, hay agendas que se cierran casi una semana -como en Rosalía de Castro- y otras que ayer no tenían huecos libres hasta el viernes de la próxima -en Casco Vello o Coia-.

Al no tener sustitutos suficientes, hace tiempo que el Sergas recurre a los propios compañeros de los centros de salud para cubrir vacaciones o bajas cortas. Lo hacen con prolongaciones de jornada -de 4 horas- o con intersustituciones. El problema es que después del esfuerzo habitual de cada verano, este año se sumaron muchas otras circunstancias que obligaron a prolongarlo en el tiempo. Además de los 42 médicos de baja -buena parte, de larga duración-, se sumaron 24 salidas por jubilaciones, el concurso de traslados, la última Oferta Pública de Empleo y renuncias.

El concurso de traslados implicó también el movimiento de más de medio centenar de facultativos, que disponen de tres días para cambiarse o 15 si son de fuera de la provincia. Y luego, también se tardó en cubrir las vacantes que dejaron libre en su lugar de origen.

Todo este proceso se alargó hasta el 25 octubre y durante este tiempo, los médicos que estaban en sus consultas se hicieron cargo de estos huecos. "Tuvieron incrementos de las agendas muy importantes, de hasta 60 y 70 pacientes al día", reconoce la directora de Procesos sin Ingreso, Elena Lorenzo Llauger, que agradece su "implicación".

"Han colaborado y colaboran muchísimo, pero ahora estamos notando el desgaste y tenemos problemas para encontrar voluntarios para prolongaciones de jornadas", cuenta la doctora Lorenzo. A esta sobrecarga se suma que otros médicos que desean presentarse a las próximas oposiciones -a finales de noviembre- y no han podido coger vacaciones o días de libre de disposición para prepararlas, rechacen estos aumentos de jornada para poder estudiar.

Así, hay ciertos centros de salud que están teniendo serios problemas para cubrir algunas ausencias y se producen grandes demoras en algunos cupos. Como en Rosalía de Castro, donde las vacaciones que ayer cogió un profesional no se podrán cubrir hasta el martes de la próxima semana y ayer ya no quedaban huecos libres hasta el jueves 15. O en el Casco Vello, en el que en algún cupo no se podía coger cita hasta el viernes 16, igual que en Coia. Eso sí, se atienden todas las urgencias.