Cuando José Manuel Costas se fugó para eludir su inevitable ingreso en prisión, el caso por el mayor fraude fiscal con facturas falsas detectado en Galicia, trama en la que este empresario vigués era cabecilla, siguió su recorrido judicial. No se paró. En los dos años transcurridos desde su huida hasta su captura en Portugal en los juzgados de lo Penal de Vigo continuaron los juicios de la megacausa:_si hasta que se escapó se habían celebrado ya más de 80 vistas que desembocaron sin excepción en condenas, durante su ausencia hubo otras 9 contra más empresarios en las que a él, también acusado, se le declaró en rebeldía. Pero el jefe de Las 5 Jotas saldará esta semana todas sus cuentas con la Justicia en lo relativo a este procedimiento -tiene abierto otro caso urbanístico en Ourense-. Y es que aprovechando la celebración del último juicio del entramado, el de los bancos, se están cerrando también todos esos otros pendientes, a modo de maratón, con breves vistas de conformidad en las que el empresario está reconociendo su culpabilidad y aceptando las condenas: ayer hubo seis en los juzgados de lo Penal 1 y 2 y el viernes serán las tres restantes en el 3.

Los nueve juicios pendientes contra Costas en esta causa de fraude a Hacienda, al margen de la de las entidades bancarias, suman facturas falsas que superan los 17 millones de euros. Estas piezas separadas son entre otras las de Ibérica de Construcciones Civiles y Servicios Inmobiliarios, Prefabricados Castelo, Talleres Ganomagoga, Konstrunorest, Feyju Galicia, Construcciones Dabalpo y Estructuras Dabalpo o el que es uno de los procesos más importantes del caso, el de Darzal Consultoría y Prevención, donde las facturas a juicio ascendieron a 8,6 millones y cuya sentencia está recurrida. Ayer se celebraron cuatro rápidas vistas consecutivas en Penal 1 y dos más en Penal 2 en las que el empresario aceptó las penas solicitadas por el fiscal. En una de ellas, por ejemplo, se le impusieron dos años de cárcel por delito continuado de falsedad y dos más por sendos ilícitos contra la Hacienda Pública, junto a multas que superan los 660.000 euros. Y el viernes habrá más conformidades en los tres juicios que le quedan en Penal 3, entre ellos el de Darzal.

Pese a la sucesión de condenas que ha ido acumulando Costas en cada una de las piezas separadas, que una vez cerrada la trama superarán las 90, el caso del jefe de Las 5 Jotas dio lugar a una situación jurídica excepcional. Y es que el máximo de cumplimiento en la cárcel no debería exceder los 6 años, el triple de la pena más grave impuesta, la de 2 años por el delito continuado de falsedad en documento mercantil. El límite penológico se aplicó para que a efectos prácticos su pena no supere la que hubiese recibido de haberse celebrado un único juicio. En todo caso, en el cómputo de cumplimiento efectivo se le ha aplicado un máximo de seis años y seis meses, por lo que su nuevo abogado, una vez se dicte la última sentencia del entramado, la de los bancos, pedirá que el límite se rebaje a seis años.

Pendiente de una operación

Costas, que está pendiente de una intervención quirúrgica, fue detenido en Portugal en junio tras dos años de fuga. Fue extraditado el 5 de julio por el puesto fronterizo de Badajoz, ingresando en una prisión de esa ciudad hasta que el 1 de agosto fue trasladado al penal pontevedrés de A Lama, donde permanece en régimen ordinario, en segundo grado penitenciario, según fuentes penitenciarias. Allí está también cumpliendo condena por esta trama su hermano Jacobo. En Badajoz se le habían restringido las comunicaciones, salvo a su abogado, medida que fuentes próximas al empresario tildaron de excesiva.