El tramo central de las rampas de Gran Vía echa a andar de forma oficial. El alcalde acaba de anunciar la salida a licitación del proyecto por 5,18 millones de euros tras ser aprobado en una Junta de Gobierno extraordinaria. La actuación completa está diseñada para remodelar los 600 metros que separan Urzáiz de Plaza de España, pero ante la negativa de Patrimonio por afectar al perímetro de protección de algunos edificios históricos de la calle, el Concello ha optado por acometer en una primera fase el tramo comprendido entre María Berdiales y Venezuela.

Se trata de unos 250 metros de calle con una pendiente que roza el 9%. La filosofía del proyecto se mantiene intacta con varios tramos de rampas mecánicas bajo una cubierta acristalada de colores que resguardará a los viandantes en los días de lluvia. En paralelo y también bajo la cúpula discurrirá el paseo peatonal para que se pueda avanzar a pie en medio de un jardín vegetal y con música ambiente de fondo.

"Vamos a humanizar la mitad de la Gran Vía con varias rampas mecánicas, paneles fotovoltaicos, una fuente ornamental, más zona verde y nuevas redes de abastecimiento, saneamiento y pluviales. Es una humanización integral y esto es lo que quiere paralizar Núñez Feijóo", criticó ayer el alcalde al anunciar la licitación de la obra tras la desestimación de un recurso de reposición de una vecina.

El Concello estima que serán necesarios cuatro meses para tramitar la obra y ocho de ejecución, por lo que este espacio debería estar finalizado dentro de un año.