Ni su papel estratégico. Ni los años de lucha que hicieron falta para arrancar el compromiso de su construcción. A pesar de la urgencia de algunas infraestructuras -como la ampliación de Rande, la nueva sede de la Tesorería de la Seguridad Social o la Ciudad de la Justicia-, Vigo tuvo que esperar años para desatacarlas.
Hoy en la ciudad avanzan media docena de obras para infraestructuras clave. Algunas, como la reforma del antiguo Hospital Xeral para que albergue servicios judiciales, avanzan a buen ritmo con el objetivo de cumplir con su calendario. Otras tienen un cronograma un poco más complicado. Es el caso por ejemplo de la reforma de la A-55 para mejorar su seguridad. Los trabajos arrancaron con un presupuesto de 5,98 millones y un plazo de ejecución de 19 meses, por lo que deberían haber concluido a principios del verano de 2017. Poco antes de consumir ese plazo, Fomento pospuso su fin hasta septiembre de 2018. A punto de expirar ese segundo compromiso del Gobierno, la señalización de obra todavía sigue en la autovía.
Un calendario confuso tiene también la ampliación de Rande. Los nuevos carriles laterales del viaducto se inauguraron el 30 de diciembre de 2017, justo a tiempo para que Audasa pueda aplicar una subida extraordinaria de los peajes de la AP-9 en compensación por acometer las obras. Sin embargo los operarios siguieron trabajando en el puente. De hecho en febrero Fomento anunció nuevos trabajos que obligaron a cortes de carriles durante varios meses, lo que ocasionó graves atascos. En agosto -ocho meses después de la inauguración de las "alas" laterales- los operarios seguían en Rande.
Una de las características de la ampliación del viaducto fue su parálisis inicial. Los intentos de Audasa y las constructoras de cambiar el proyecto original provocaron que durante meses no se registrasen avances en el puente. Algo similar ocurrió con la nueva sede de la Tesorería General de la Seguridad Social, que se levanta por encima de la fachada original de La Metalúrgica. El acto oficial de inicio de los trabajos se celebró en marzo de 2016 -acudió la exministra de Empleo, Fátima Báñez-. Durante los meses siguientes sin embargo apenas se vieron avances en el solar de García Barbón. De hecho en diciembre de 2016 el Gobierno reconocía que se había ejecutado el 4% del inmueble.
En julio del año pasado sin embargo se intensificó el movimiento en la parcela de La Metalúrgica. El edificio se alza ya sobre la antigua factoría e incluso luce la cristalera de su fachada. Desde la Tesorería de la Seguridad Social se confirma que las obras avanzan según lo "previsto", "salvo un pequeño hormigonado a mayores". Desde el ministerio siempre se situó su inauguración en la primavera de 2019.
Buen ritmo llevan también los trabajos en el antiguo Hospital Xeral para reconvertirlo en Ciudad de la Justicia. En mayo finalizó el derribo, que dio paso a la fase de construcción. El plazo de ejecución de las obras es de 21 meses, con lo que deberían finalizar a principios de 2020. El futuro complejo aglutinará todos los servicios judiciales de la ciudad y tendrá una superficie construida de 38.418 m2. Bajo la estructura se abrirá un aparcamiento de 7.600 m2 -266 coches y una decena de motos- para los empleados de los tribunales.
Otro de los grandes proyectos en marcha es el de la sede de la sede de la Universidad de Vigo en O Berbés. El espacio que ocupará está vallado y la maquinaria puede apreciarse desde la plaza. Los trabajos arrancaron a finales de 2017 después de que se adjudicasen a la empresa Ogmios. El presupuesto es de 1,65 millones y el plazo de ejecución de 18 meses. En junio, durante una entrevista con FARO, el vicerrector de Planificación y Sostenibilidad, José Luis Míguez Tabarés, explicaba que desde el nuevo equipo de gobierno de la Universidad se pretende "que O Berbés no solo sea un centro para estudiantes, sino algo más abierto que influya en la ciudad".
En Balaídos avanza la reforma. Concello y Diputación han renovado las gradas de Río y Tribuna y quedan pendientes ahora Gol, Marcador y el parking de un millar de plazas con el que se busca atajar los problemas de aparcamiento del entorno, en especial los días de partido.
Aunque todavía no se pusieron en marcha, otras actuaciones deberían arrancar en breve. Entre ellas destaca el complejo Vialia. El proyecto está adjudicado a Immochan -ahora Ceetrus-, que prevé invertir 84 millones de euros. A esa cantidad se sumará lo aportado por las diferentes marcas que se instalen en la superficie. En total se alcanzarán los 150 millones de euros. A finales de julio la Xunta otorgaba la autorización comercial al complejo.
Sobre la mesa hay otras actuaciones igual de estratégicas: la rehabilitación de la Panificadora o la del Barrio do Cura, que ayudarán en la recuperación del Casco Vello.
