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La evolución del transporte público

Vitrasa afianza su crecimiento por tercer año consecutivo con 1.000 usuarios más cada día

Entre enero y julio los autobuses urbanos contabilizaron 214.000 viajes más que en el curso anterior -Aumenta también el número de transbordos en 11.522 -Certifica su recuperación al anotar su mejor registro desde 2012

Flota de Vitrasa. // Marta G. Brea

Cada vez son más las personas que se suben al autobús urbano. Tras la época oscura comprendida entre 2011 y 2015, donde perdió más de un millón de usuarios transportados, Vitrasa vuelve a exhibir su buena salud. Entre enero y julio contabilizó más de doce millones de viajes (12.774.309), lo que supone un incremento de casi 214.000 respecto al mismo periodo del ejercicio anterior. Es el tercer curso consecutivo en el que las estadísticas de la concesionaria del transporte publico de la ciudad arrojan números verdes. En 2016 el incremento había sido de 170.000 pasajeros. Precisamente ese año fue un punto de inflexión respecto a la tendencia que traía la compañía, con sucesivas caídas desde 2011. Pese a que los actuales números son buenos, todavía quedan lejos los registros del año 2008, cuando cerró su temporada anual con 22,8 millones de pasajeros transportados.

Entre las personas que se subieron a alguno de los autobuses que Vitrasa despliega por todo el límite municipal hay dos tipos de usuarios: los que abonan el viaje y aquellos que se benefician del transbordo que ofrece la compañía. Una vez validado el primer trayecto disponen de 45 minutos para hacer, como máximo, dos saltos a otras líneas de carácter gratuito. Entre enero y julio estos pasajeros superaron el millón de viajes. Este año la concesionaria ajustó el precio de cada billete hasta los 1,35 euros, aunque dispone de numerosos descuentos. Los portadores de la PassVigo abonan 0,89 euros por trayecto, los estudiantes 0,86, los universitarios 0,67 euros y los pensionistas tipo 1 y 2 tienen los viajes gratuitos gracias a la aportación municipal.

Todo apunta a que Vitrasa cerrará el año con un saldo positivo de viajes, poniendo el broche de oro a un trienio muy satisfactorio para la compañía. En los siete primeros meses del presente ejercicio, por ejemplo, los autobuses movieron a 550.000 viajeros más que en 2015. Una buena noticia para la empresa es que el crecimiento es constante mes a mes. Entre enero y julio tan solo se obtuvieron peores resultados que en 2016 en marzo y junio. Respecto a 2015 los números son todavía mejores ya que se mejora los guarismos de todos los meses.

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Otro de los factores a los que tradicionalmente se aferra la compañía para analizar las estadísticas es el meteorológico. Julio no fue un mes especialmente caluroso y las playas lucieron un aspecto desolador en más de una jornada. Agosto está siendo todo lo contrario. Día tras día los arenales están repletos de bañistas y los autobuses lucen el mismo aspecto. La demanda para ir a Samil y otras playas cercanas creció hace dos años cuando la Concejalía de Tráfico habilitó un carril extra de circulación en la avenida de Europa que eliminaba los tediosos atascos. Además, Vitrasa amplía los horarios de sus líneas y proyecta buses de refuerzo en hora punta.

En estos primeros meses de 2018 la concesionaria impulsó una de las medidas más aplaudidas entre sus usuarios. Las paradas antiacoso fueron una realidad a mediados de febrero. Aunque inicialmente estaban pensadas para las mujeres que se subían a un autobús a partir de las 22.30 horas, cualquier pasajero puede solicitarla. La mecánica es muy sencilla. Al subirse al vehículo, la persona que quiera beneficiarse de esta posibilidad le indica al conductor el punto exacto en el que quiere bajarse dentro del recorrido habitual del servicio y se quedará en los primeros asientos para que, llegado el momento, pueda salir por la puerta delantera situada junto al chófer.

Las líneas más demandadas por los pasajeros son la C3, que une Bouzas con Chapela y que en verano se extiende hasta la zona de playas, L5A, que enlaza Buenos Aires con Navia por Urzáiz y Policarpo Sanz, y las que tienen su final en la Universidad.

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