El solemne novenario en honor al Santísimo Cristo de la Victoria se encuentra en la recta final y la Concatedral será la meca de muchos devotos durante los momentos más emotivos de la festividad: la imposición de medallas, la lectura del pregón, el descendimiento de Cristo y la reconocida procesión.

Esta tarde, tras el rezo de la novena presidida por el obispo Luis Quinteiro, la Colegiata presenciará la distinción de los nuevos cofrades de la congregación. José Troncoso, vicepresidente de la cofradía, será quien imponga medallas a las mujeres e insignias a los hombres para reconocerlos simbólicamente como nuevos cofrades.

Cada año, decenas de fieles se incorporan deseosos a la cofradía. Pili Fernández-Cid, auxiliar de enfermería en la UCI Pediátrica del Hospital Álvaro Cunqueiro, acude a la procesión desde hace al menos 32 años. Pili ofreció a su padre al Cristo para que sanara su enfermedad y, así fue, porque "el Cristo es milagreiro", asegura. Su devoción se la ha transmitido a sus hijos y nietos y, a pesar de no poder estar presente en la imposición de medallas, ella también se incorporará a la congregación. "Debido a mis horarios laborales no puedo ir esta tarde a la Colegiata, pero la Cofradía me ha puesto todas las facilidades para poder recibir mi medalla", cuenta. Para Pili la ciudad tiene dos emblemas que son inherentes a todo vigués: el Cristo y el Celta.

María Carrecedo es amiga de Pilar y será la encargada de entregarle la distinción. Ella también pasará a formar parte de la hermandad: "Hasta ahora, durante muchos años, lo he estado intentando pero no siempre estuve a tiempo, entonces lo postergaba, pero ayer me llamó mi amiga Pili para recordármelo y acepté".

En su caso, el fervor no está ligado a la tradición familiar, como en muchos otros casos. Sin embargo, esta tarde no solo María da el paso, sino que su marido Ricardo y su hija Antía, estudiante de Integración Social, también serán distinguidos. "Cuando decidí hacerlo, aproveché para comentárselo a mi marido y a mi hija. Mi otra hija se encuentra en Madrid así que, al no poder estar presente, prefirió decir que no", comenta.

El descendimiento y la procesión, a la que suele acudir con Pili, son sus momentos predilectos de la festividad.

Pili Fernández Cid - Auxiliar de Enfermería

"La ciudad de Vigo tiene dos emblemas: el Celta y el Cristo"