Tan solo un día necesitó el Vigo SeaFest para superar los asistentes a su primera edición. Y es que este festival se ha consolidado en solo dos años como un nuevo evento festivo en la ciudad. La mezcla de música y gastronomía marítima de autor, local y de calidad dio con la clave del éxito. Así lo valora su director Alberto Alonso, quien apremia el gran trabajo de los cocineros durante todo el fin de semana. "Su trabajo ha sido excelente, se ha logrado un ambiente familiar fantástico. La gente llenaba el recinto tanto por la mañana por la tarde, no solo en momentos puntuales", reconoce Alonso.

Ayer se puso punto y final a este recorrido por el mundo del pescado y del mar desde todas sus vertientes. Los deportes acuáticos acogieron gran parte del protagonismo en la jornada de ayer si bien fueron las diferentes propuestas gastronómicas e incluso los talleres infantiles los que despertaron más seguimiento por parte de los asistentes, que superan la cifra de 100.000 durante estos cuatro días. "Creo que nuestro punto fuerte es que había actividades y una programación en todo momento", señala Alberto Alonso, muy satisfecho con el resultado del festival.

Sus ocho escenarios también reunieron a diario a un nutrido número de asistentes, que aprovecharon para disfrutar de las bandas y grupos locales de Vigo, uno de los objetivos que se planteó la organización, Arvi, al inicio del evento. "Hemos logrado consolidad el SeaFest como una fiesta

El buen tiempo registrado estas jornadas pasadas también ayudó a mantener este fervor en el recinto llevando todas las mesas y parques del entorno. "Podemos definirla como una romería contemporánea", añade Alonso. ¿Y para el año que viene? Todavía hay que terminar de cuantificar y valorar la actual, pero sus organizadores sí tienen claro que este es el paso a seguir. "Siempre hay algo que mejorar, por supuesto, pero esta es la línea. Hemos superado las expectativas que nos marcamos con respecto al año pasado", asiente Alberto Alonso.