El alcalde de Vigo, Abel Caballero, recibió ayer exultante el nombramiento de David Regades como nuevo delegado de Zona Franca. El regidor se muestra convencido de que con esta designación la ciudad recibirá "un extraordinario impulso en su proyecto de modernización y transformación", porque, a su juicio, "por primera vez en la historia el consorcio irá de la mano de la ciudad; si la velocidad de cambio que estaba experimentando Vigo era muy elevada, ahora iremos a toda máquina".
Caballero, tradicionalmente muy crítico con la implicación y el compromiso de Zona Franca en proyectos estratégicos para la ciudad, considera que la situación dará un "giro total" con la presencia de Regades, una persona de su máxima confianza, al frente del organismo. "A partir de ahora se remará en la misma dirección que el Concello; no será más un obstáculo ni una piedra en el camino, sino un motor clave para el impulso dinamizador que le estamos imprimiendo a Vigo y que los ciudadanos aprecian y valoran. Ganamos un aliado valiosísimo. Conozco perfectamente cómo trabaja David, y lo hará muy bien", asegura.
El alcalde reprocha a Zona Franca, hasta ayer dirigida por Teresa Pedrosa, nombrada por el Gobierno de Mariano Rajoy, que haya jugado un "papel muy limitado en el proceso dinamizador de la economía y de las infraestructuras de Vigo y su territorio. Eso va a cambiar a partir de ahora. Zona Franca [institución cuya presidencia él ostenta] se va a sumar sin complejos al proyecto transformador que pusimos en marcha hace once años y lo va a hacer con más ambición y celeridad".
Caballero mantiene que esta designación se produce en un momento clave que es necesario aprovechar. "Por un lado, la reactivación económica; y por otro la presencia de un nuevo Gobierno en España que está generando ilusión y confianza entre los ciudadanos, un Gobierno que ha insuflado aire renovado después de demasiado años del Partido Popular".
Conocedor del "proyecto Vigo"
El hecho de que Regades llegue a Zona Franca desde la corporación es, para el regidor, otra circunstancia que alimenta su optimismo. "David lleva once años en mi gobierno, conoce perfectamente el proyecto de la ciudad que promovemos, conoce cuáles son nuestros objetivos estratégicos y no hace falta explicarle nada, porque los comparte al cien por cien. Por fin Concello y Zona Franca van a trabajar en perfecta sintonía", explica.
Además, enfatiza que la presencia de un hombre su máxima confianza en Zona Franca se suma a la de Carmela Silva al frente de la Diputación, con lo que Vigo se sitúa "en una posición privilegiada, con dos personas capaces, valiosas y que tienen clarísimo que somos el motor de la provincia, un motor que hay que alimentar porque si a Vigo le va bien a toda la provincia le irá bien", concluye.
