Marea de Vigo votó ayer en contra de la aprobación del superávit que se someterá a debate en el Pleno del 27 de junio. El motivo principal son los 4 millones etiquetados como "equipamientos culturales y museos" que se reservará el gobierno local para hacer frente a una primera parte de los 35 millones de euros en que el interventor municipal cifró hace unos días la responsabilidad patrimonial del Concello en la liquidación de Pazo de Congresos.

El portavoz del grupo, Rubén Pérez, considera "una artimaña y una completa manipulación" que se destine parte de esos recursos procedentes de partidas sin ejecutar en 2017 a abonar la indemnización a la anterior concesionaria del recinto de Beiramar.

"Lo que hace el gobierno con el superávit es continuismo de años pasados y no difiere en absoluto del destino que le daba el PP", resaltó el edil vigués antes de criticar que la mayoría de los fondos vayan a una decena de humanizaciones. Marea reclama que se destinen esos recursos a guarderías ,centros de primaria, dotaciones culturales o proyectos de asistencia social primaria.