Caminar kilómetros y kilómetros pudiendo admirar las Cíes, discurriendo por renovados senderos o atravesando paseos litorales es más llevadero. Esto es lo que debieron pensar los más de 4.000 peregrinos que este año optaron por llegar a Compostela atravesando la ciudad olívica. Y es que el Camiño Portugués pola Costa -que transcurre entre A Guarda y Redondela- ha disparado sus adeptos. En estos seis primeros meses, los caminantes que marcharon por la ruta jacobea viguesa suman 4.124, casi el triple de los registrados a principios de junio de 2017, cuando se contabilizaron 1.658. Solo durante la primera semana de este mes fueron 401 los peregrinos que recorrieron esta vía, más de medio centenar al día animados por una mejoría del tiempo y la llegada del periodo vacacional.
Los atractivos intrínsecos del trayecto, como son los arenales y montes que abrazan la ciudad, contrastan con la falta de indicaciones, que según asociaciones especializadas en el Camino, restan potencial al trayecto. "Es cierto que la ruta por Vigo está ganando muchísimo interés, nos preguntan mucho por ella y cada vez más; pero sería necesario reforzar los indicadores y señalizaciones más clara", comentan desde la Asociación Amigos dos Pazos.
Este trayecto atraviesa Vigo de una punta a la otra. La ruta comienza en la rotonda de la parroquia de Saiáns y prosigue por la iglesia de Coruxo, paseo del Lagares (en los Molinos), Balaídos, Florida, Travesas, Camiño da Seara (Camelias), Tomás Alonso, Peniche, Camiño de Pazos, calle Chile, Pi y Margall, calle de Santiago, Paseo de Alfonso, Elduayen hasta llegar a la Colegiata, desde donde se bajaría a la calle Gamboa, Plaza Compostela, Arenal en dirección Teis y desde ahí ya entraría en la carretera con Chapela, Redondela.
Sobre el auge de esta ruta alternativa al tradicional Camiño Portugués, que contabiliza ya 24.081 peregrinos este 2018, ya puso foco la Xunta, que prevé invertir más de 2 millones de euros en estas necesidades. Básicamente, esos fondos irán destinados a dos tipos de obras, la renovación de la señalización y la mejora de ambas rutas.
En Vigo, una de las actuaciones claves será el nuevo albergue que acogerán los soportales de O Berbés. El Consorcio Casco Vello, participado en un 90% por la Xunta y con un 10% de aportaciones municipales, ya aprobó el pasado 1 de junio la cesión de un edificio en O Berbés que el organismo autonómico transformará en un albergue de peregrinos con aproximadamente 90 plazas, como adelantó FARO. En él se invertirán cerca de un millón de euros y pretende estar listo antes del Xacobeo. El inmueble preseleccionado da a las calles Ribeira Berbés 5 y Peñasco 7, y hasta hace unos años acogía uno de los últimos negocios de la plaza viguesa, el conocido restaurante O Pescador.
