El muelle del Real Club Náutico ha sido estos días el fondeadero elegido por el pequeño buque escuela de la armada francesa Mutin para dar un breve descanso a su tripulación que se dirige a Brest desde el Mediterráneo francés.

El Mutin es la unidad más antigua de la armada gala, con nada menos que 91 años de intensa vida marinera en la que llegó a participar en la II Guerra Mundial como buque espía. Fue botado en 1927 para la formación de pilotos de la marina de guerra de su país, actividad que todavía le mantiene activo hoy.

Aparejado de queche, mide 33 metros de eslora, desplaza 82 toneladas y su velamen alcanza los 312 m² de superficie. Según informa Incargo Galicia, a bordo viajan 20 personas.