Juan Carlos González Martínez, conocido como "Culebra", murió este pasado viernes en Vigo. Sus restos fueron incinerados sin que ni su mujer ni sus tres hijos, todos en prisión, asistiesen a este último adiós. El condenado como cabecilla de la mayor operación de blanqueo de narcotráfico de la ciudad falleció sin llegar a ingresar en prisión pese a la condena, algo que sus abogados eludieron por el estado de salud de este hombre al que le faltaban meses para cumplir los 80 años.

Fue en 2015 cuando la Sección Quinta de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, impuso penas que suman 50 años de cárcel y multas por valor de 168 millones a la red de blanqueo de capitales que lideraba el ahora fallecido. El tribunal condenó a doce acusados.

La mayor pena, de 6 años de cárcel y 56 millones de euros de multa, se impuso al líder de la red, "Culebra", que contaba entonces con 76 años de edad. Además de González Martín, la sala viguesa sentenció a su mujer, Nieves Domínguez Elexpuru, y a sus tres hijos Juan Carlos, Alejandro y Ana Isabel, a quienes impone 5 años de cárcel a cada uno por el delito de blanqueo, así como multas de entre los 20 y los 30 millones de euros.