Tambores de guerra en la plantilla de Ryanair. Los sindicatos de tripulantes de cabina de pasajeros (TCP) de varios países europeos, entre ellos España, se reúnen hoy en Madrid para definir las acciones conjuntas a llevar a cabo ante la "falta de voluntad" de negociar por parte de la aerolínea, entre ellas la posibilidad de convocar una huelga este verano.

La amenaza de un paro lleva sobre la mesa planteada desde el 24 de abril. Entonces, el sindicato belga CNE/LBC, el luso SNPVAC, el italiano Uiltrasporti y los españoles Sitcpla y USO, se comprometieron en Lisboa a pedir a Ryanair que todos los trabajadores europeos tuvieran las mismas condiciones y que se ajustara a la legislación en materia laboral.

En caso contrario, a partir del 30 de junio los representantes de los trabajadores comenzarían a tomar sus propias medidas, entre las que se valoraba la huelga. Pese a que Ryanair hablaba de "considerables avances" con los sindicatos de TCP, especialmente en España, tras presentar sus cuentas anuales hace justo una semana, los sindicatos Sitcpla y USO aseguran que las negociaciones llevan "rotas varias semanas".

Fuentes sindicales recuerdan que el desencuentro de abril tras un acercamiento entre las partes se produjo cuando Ryanair advirtió a los tripulantes de cabina que tendrían que enfrentarse a "graves consecuencias" si no acudían a cubrir a los trabajadores que estaban en huelga en Portugal.

Por otro lado, el alza del crudo repercute en el precio medio de los billetes que la aerolínea despacha en este segundo trimestre. El promedio de subida es del 4%.