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El embajador vigués de LaLiga en Egipto

Juan Fuentes es uno de los 44 delegados internacionales de la competición española en el exterior -"La pasión por nuestro fútbol es enorme, llega a los corazones", dice

de El Cairo.

A más de tres mil kilómetros de Madrid, los aficionados cairotas del club blanco viven los partidos con idéntico entusiasmo de quienes celebran los goles de su equipo en las gradas del Bernabéu. "La pasión por el fútbol español en Egipto y todo Oriente Medio es enorme. Llega a los corazones de la gente y esto es algo muy poderoso que muy pocas marcas pueden ofrecer", destaca el vigués Juan Fuentes, delegado de LaLiga en aquel país tras superar un estricto proceso de selección que implicó a más de 12.500 aspirantes de todo el mundo.

Él es uno de los 44 representantes de LaLiga Global Network, "un proyecto pionero y diferenciador" que arrancó a finales de 2016 con la misión de establecer una red global que llegase hasta los fans del resto del planeta: "La liga se ha convertido en una empresa global y había que salir para vivir allí donde están los mercados, conocer a los aficionados y estar en contacto con los medios y potenciales colaboradores. Se trata también de transmitir nuestro know-how y, a la vez, aprender de los demás países. La red crea un valor añadido muy interesante".

Fuentes (Vigo, 1989) también destaca el carácter multidisciplinar de su trabajo. "Nunca te aburres. Nos ocupamos del desarrollo de negocio, buscamos sinergias con posibles patrocinadores, analizamos la cobertura audiovisual, asesoramos a clubes del país y establecemos acuerdos con fundaciones o ligas. Probablemente abriremos nuestras propias academias en Egipto este año", explica sobre su labor.

Titulado en Derecho con premio extraordinario, LaLiga le propuso Egipto entre los 44 posibles destinos por su "bagaje" profesional. Llegó al país en 2015 con una beca del ICEX para trabajar en la oficina comercial de la Embajada de España y, al año siguiente, se desplazó a Filipinas como analista de mercado y editor jefe de Oxford Business Group.

La empresa británica, con presencia en 34 países, realiza los informes sobre economías emergentes que después manejan los expertos del Banco Mundial, gobiernos, compañías y organizaciones. "Tuve la oportunidad de reunirme con los responsables de las grandes empresas filipinas, ministros o secretarios de Estado para analizar la situación del país, sus oportunidades y sus desafíos", destaca sobre la experiencia.

Ya inmerso en el proceso de selección de LaLiga, también trabajó para una ONG en Hanói, la capital vietnamita, impartiendo clases de inglés. Y tras regresar a España para asistir a las últimas fases de clasificación y formación, el vigués se incorporó el año pasado a su nuevo puesto en El Cairo.

"Mi sector siempre ha sido la internacionalización y ahora me dedico a lo mismo pero en el ámbito del entretenimiento. El fútbol me encanta y representar sus intereses es muy interesante. Aquí la fiebre por la liga española es brutal y nuestro proyecto gusta mucho. Solo en Oriente Medio sumamos 5 millones de seguidores en las redes sociales. Mi jefa en la Embajada siempre me decía que el fútbol es el mejor rompehielos en las negociaciones. Es increíble cómo pueden decirte de carrerilla las plantillas de muchos equipos", destaca el vigués, que actualmente también realiza un curso universitario de especialista en eSports, una "industria emergente" en el campo del ocio y el deporte.

Él siempre recuerda la anécdota vivida poco después de su primera llegada al país con un niño que vestía una ajada elástica del Barça con el dorsal de Messi: "Le presté mi iPhone para que jugase y cuando le dije de broma que podía seguir utilizándolo si me regalaba la camiseta me lo devolvió enseguida. Para él era sagrada".

Y es que el fútbol también es el deporte rey en Egipto. Nuestra liga está entre las más seguidas y Madrid, Barcelona y Atlético, que en diciembre jugará en El Cairo un amistoso con el Al-Ahly, uno de los principales equipos locales, copan el mayor número de seguidores y tienen sus propias peñas. Aunque los egipcios también sienten simpatía por el Celta. "Muchísima gente lo conoce por Mido, que jugó en Vigo en 2003 y es una leyenda en el mundo árabe. Fue un de los primeros en llegar a los grandes clubes europeos y todo el mundo lo seguía", recuerda.

Hoy el ídolo es Mohamed Salah, el "faraón" del Liverpool que además ha impulsado a la selección egipcia a jugar el Mundial después de 28 años. La final de la Champions que disputarán el conjunto inglés y el Madrid reunirá, como cada "clásico" contra el Barça, a miles de seguidores y Fuentes asegura que los aficionados blancos, como los de España, son "muy fieles" a sus colores.

"La manera de consumir el fútbol es muy similar. Los egipcios se reúnen en bares y cafeterías y cuando se enfrentan Madrid y Barcelona las peñas organizan encuentros de miles de personas. Yo estuve en el último y fue una pasada", reconoce.

Más allá de los folletos turísticos y de la imagen "distorsionada" de la seguridad que a veces transmiten los medios, Fuentes califica al país de "espectacular" y destaca su "calidad humana". Encantado con la experiencia en Oriente Medio, se esfuerza en mantener los vínculos con su tierra. Asesora a estudiantes de la Universidad de Santiago dentro de un proyecto de mentoring y, junto a varios amigos, es fundador del Instituto Galego do Talento, que busca ayudar a los jóvenes profesionales e impulsar la marca de nuestra comunidad en el exterior dentro de un programa cuyo nombre constituye otro guiño al fútbol, Afouteza Fórum.

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