Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Docentes que no olvidan sus pizarras

-El CEIP Canicouva celebra su 50 aniversario reuniendo a los primeros profesores del centro -"Crear las bases es lo más complicado y vosotros cumplisteis con creces", elogia su director

Profesores y antiguos alumnos acudieron junto al alcalde y la edil de Educación al acto de celebración del medio siglo del Canicouva. // J.Lores

Sus nombres figuran en las primeras actas que se redactaron en el centro allá por el año 1968. A muchos no se les ponía cara más allá de las orlas que engalanan los pasillos del colegio. Hasta ahora. Cualquier momento hubiera sido bueno para reunirlos a todos pero ninguno mejor que unas bodas de oro para reafirmar este lazo docente anudado durante cincuenta años. "Aunque me fui a otros centros, a nivel social el Canicouva estableció relaciones muy fuertes", reconocía la profesora Margarita Villar.

Esta docente ya jubilada fue una de la veintena de extutores del CEIP Canicouva que se dieron cita en el salón de actos donde fueron homenajeados por la actual directiva del centro con Ramón Méndez a la cabeza. "Crear y asentar las bases siempre es lo más complicado y vosotros lo habéis cumplido con creces", señalaba el director del colegio.

El acto contó con la presencia del alcalde Abel Caballero y la concejal de Educación Olga Alonso, quienes agradecieron la implicación y vocación de todos los docentes por formar a las futuras generaciones. Ambientado con la música tradicional del grupo Remol; la reunión juntó al pasado y presente del colegio de Castrelos donde no faltaron los abrazos y las anécdotas cada vez que uno se reconocía en las imágenes de un emotivo vídeo que elaboró la directiva. Carcajadas de algunos, ojos vidriosos de otros y un aplauso al unísono resonaron en una jornada de festividad para el colegio.

Porque no solo celebraba sus 50 años formando a las generaciones del futuro, sino también la condecoración como Vigués Distinguido junto con el colegio Fléming. "Cuando fuimos reconocidos con este galardón nos acordamos de todos vosotros, de estos primeros miembros que asentaron las bases del centro. Pasaron mucho años y otros tantos cambios pero seguimos igual, manteniendo la misma esencia aunque se empleen otros medios", admitía Ramón Méndez.

Podría parecer que esta digitalización es el motor de la enseñanza actual y aunque estos profesores se encontraron con estos medios casi al final de su trayectoria sostienen que ganaron y enseñaron con una valor mucho más importante: la experiencia. "Pasé cerca de 30 años en este centro y casi cuando se encuentras en el máximo de tu sabiduría, te jubilas", bromeaba Isabel Avendaño, para quien sus compañeros fueron y son "el verdadero motor" del colegio. "Cada vez que pienso en el Canicouva me acuerdo de todos los profesores, especialmente los que ya no están", recuerda esta docente mientras saluda a la madre de uno de sus antiguos alumnos.

Por su parte, Margarita Villar guarda un grato recuerdo del "dramatismo del centro". "La inclusión del teatro en las aulas influyó mucho en el alumnado, recuerdo que cambió totalmente , ganaron mucha soltura y desparpajo", reconocía esta profesora también retirada.

El director concluyó su discurso con una advertencia: "Este siempre será vuestro colegio, deberíais venir más a menudo".

Isabel Avendaño - 30 años de docente

"Cuando pienso en el centro me acuerdo de los compañeros que ya no están"

Dolores García - Recién jubilada

"Jamás me arrepentí de ser profesora, el cariño de los alumnos es único"

Margarita Villar - 10 años en el Canicouva

"La inclusión del teatro en clase aportó soltura y desparpajo al niño"

Compartir el artículo

stats