"Todos los veranos necesitamos gente para trabajar en los campamentos de la asociación, vimos su entrevista en FARO y no dudamos en ayudarla". Con estas palabras presentaba su oferta de empleo Eduardo Fernández, presidente de la A V de Lavadores a la joven universitaria Uxía Alonso, cuya historia "indignó" a las redes: la viguesa publicitó un anunció para encontrar trabajo de "niñera o en la hostelería" y solo recibió proposiciones sexuales que la incitaban a la prostitución. "Puse un anuncio para encontrar trabajo, no para acostarme contigo si me pagas", respondía Alonso a estas insinuaciones en una entrevista a este medio.

Sus palabras calaron hondo en la asociación vecinal de la parroquia de Lavadores, quienes tan solo 24 horas después de hacer pública su historia, decidieron contactar con ella para ayudarla. "Nosotros le propusimos un contrato a media jornada, para que disfrute también del verano, para colaborar en nuestros campamentos de verano. Tenemos unas instalaciones muy grandes, con un lago y muchas zonas verdes y desde junio a septiembre siempre vienen muchos niños y personas mayores. Se trata de atenderlos y estar con ellos. Contamos siempre con cinco trabajadores que se ocupan también de la cafetería, pero en los meses estivales hace falta una persona más y Uxía entraba en el perfil", relató Fernández.

Tras hablar con la joven, el presidente de la A V Lavadores reconoció su entusiasmo por la propuesta y confía en que pronto puedan mantener una entrevista personal. "Ella estudia y reside en Santiago, tenemos que cuadrar fechas y si todo sale bien la tendremos este verano con nosotros", celebraba.

La historia de Uxía Alonso traspasó el umbral de las redes sociales y desenmascaró una sociedad con todavía muchos prejuicios sexistas. Esta viguesa de 19 años y estudiante de Filosofía publicó una oferta laboral en una página web de anuncios. Estudia fuera de su ciudad y por lo tanto necesita dinero para sufragarse los gastos y ayudar en casa. A las pocas horas recibió decenas de respuestas para contratar sus servicios, pero no de camarera o niñera, sino para prostituirse. Sorprendida e indignada, Uxía decidió contarlo en Twitter, volviendo viral su historia y obteniendo miles de interacciones, no todas positivas. "Al principio la gente que me hablaba me apoyaba y todo pero cuando fue cogiendo altura la situación pues muchas personas empezaron a decirme que si el anuncio era muy ambiguo, que la culpa era mía y no de ellos", lamentaba la universitaria.

Su afán por encontrar un trabajo adecuado a su demanda no desistió y ahora es posible que lo haya logrado gracias a la A V Lavadores.