La primera fase de la remodelación del antiguo Hospital Xeral como futura Ciudad de la Justicia concluye el próximo martes, para dar paso a la construcción. La Unión Temporal de Empresas Xestión Ambiental de Contratas (XAC), en colaboración con Orega, que se encarga de los trabajos de demolición tiene previsto concluir sus tareas y retirarse el día 15. Dejan ya la torre cubierta rodeada de andamios para la que le toma el relevo, la constructora San José, a la que le quedan por delante 21 meses de obra.
De los casi cien mil kilos de escombros que estaba previsto retirar, ya solo quedan por retirar unas pocas planchas de cobre recubriendo la torre y anclajes del antiguo revestimiento de la fachada del hospital hacia la calle Vázquez Varela. La UTE prevé terminar de quitarlos y recoger su equipamiento para salir del antiguo hospital el martes. Por seguridad y para ahorrar el montaje nuevamente del andamiaje, la adjudicataria que continúa con la remodelación lo hereda ya puesto. El acta de replanteo para la segunda fase de la actuación, adjudicada por 22,5 millones de euros -sin IVA-, podría realizarse ya al día siguiente.
El futuro complejo, que aglutinará todos los servicios judiciales de la ciudad, tendrá una superficie construida de 38.418 metros cuadrados y creará un nuevo espacio público en la zona, con una gran plaza abierta a la calle Padre Feijóo, que llevará el nombre de Miguel Ángel Blanco y que servirá de acceso principal a la futura Ciudad de la Justicia.
Bajo ella se creará un aparcamiento de 7.600 metros cuadrados, con capacidad pata 266 coches y 10 motos destinados a los empleados de los tribunales. Su construcción es uno los puntos más complejos de la obra. Para contener las paredes y evitar posibles daños en los edificios cercanos, se instalarán pantallas de micropilotes. Con esta tarea se empezará ya en los tres primeros meses, junto con el desmontes.
Para el futuro complejo judicial se reutilizará la estructura de la torre del antiguo hospital y su planta en forma de "H", así como la porción que aún se mantiene en pie del Anexo I, que albergaba las urgencias. Estos inmuebles estarán unidos por un vestíbulo de nueva construcción. Será luminoso, ya que estará formado por una estructura metálica sobre la que se colocarán dos grandes celosías laterales.
Esta segunda fase de las obras cuenta con un plazo de ejecución de 21 meses, por lo que debería finalizar antes de que concluya febrero de 2020. El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, calcula que, después, el traslado de los servicios judiciales desde la calle Lalín llevará "como mucho tres meses desde el final de la obra".
