Agosto se estrenará con un despliegue de cultura y deporte urbanos. O Marisquiño celebrará la edición que marca su mayoría de edad del 10 al 12 de agosto, el segundo fin de semana del mes. Entre el viernes y el domingo skaters, grafiteros, riders con bicicletas, músicos, bailarines... tomarán el centro de la ciudad para disfrutar de uno de los grandes festivales de street art de España. Aunque sus responsables valoraron trasladar parte de las pruebas a Samil, la actividad se mantendrá en el entorno del puerto. Las exhibiciones, competiciones y conciertos continuarán, como los últimos años, en la zona de Montero Ríos y A Laxe. En 2018 sin embargo ocuparán más espacio. Gracias a la colaboración del Puerto y Concello, el festival dispondrá de una mayor superficie para desplegar su actividad.

Una de las novedades de la edición de 2018 es que la oferta del festival se amplía. O Marisquiño incorporará una nueva disciplina, aunque aún no ha trascendido cuál será. Ese "fichaje" obligó a la organización a buscar una superficie mayor y valorar el traslado a Samil, posibilidad descartada para 2018 pero a la que no cierran las puertas los responsables del festival.

La nueva prueba se sumará a las de skateboarding, dirt jump, BMX... disciplinas que O Marisquiño incorpora desde hace ya tiempo y se completan con el cartel de conciertos y el descenso en mountain bike por el Casco Vello, una de las competiciones más vertiginosas y que causan mayor expectación.

Desde hace años el festival hace un esfuerzo por ganar competiciones y alcance. A lo largo de sus casi dos décadas de historia ha logrado acoger campeonatos mundiales. A principios de 2017, por ejemplo, la organización hizo público que la Freeride Mountain Bike había concedido la categoría "Gold" a su modalidad de Dirt Jump, lo que significa que la prueba viguesa se cuela entre las seis con mayor nivel de puntuación.

En 2017 también acogió, por cuarto año consecutivo, el campeonato de street de la World Cup Skateboarding. Muestra de su empeño por captar nuevas disciplinas, es que en los últimos años incorporó competiciones con lanchas.

Apuesta por la seguridad

Al igual que el año pasado, el festival prestará una atención especial a la seguridad. De la mano de la Autoridad Portuaria y el Concello, en 2017 la organización lanzó un plan que contemplaba vallar por las noches algunas de las partes del recinto portuario más próximas a los muelles. El festival, junto con las fuerzas de seguridad, también redobló la vigilancia para cortar de raíz la posibilidad de que se celebren botellones en el entorno. Que el recinto esté controlado es crucial para que O Marisquiño pueda seguir contando con uno de sus grandes atractivos: la Wordl Cup Skateboarding, que atrae a Vigo a grandes nombres del skate de todo el mundo y a sus seguidores. En 2017 el festival contabilizó más de 160.000 visitas, cifra récord.

Aunque las pruebas no empezarán hasta el 10 de agosto, semanas antes empezará a verse movimiento en el entorno portuario. El equipo encargado del montaje de las pistas e instalaciones arrancará su labor hacia finales de julio.