Son los trabajadores que mantienen en marcha el engranaje de la Universidad para que profesores y estudiantes desarrollen su actividad en las mejores condiciones. Y al próximo rector le reclaman negociación después de 4 años de "imposición" que han acabado por "desilusionar" a la plantilla. Un total de 768 miembros del Personal de Administración y Servicios (PAS) de los tres campus están llamados a las urnas para elegir al próximo rector. Y son un colectivo que destaca por su activa participación en la política universitaria. Valga como ejemplo que para las 25 plazas a las que tienen derecho en el próximo Claustro se han presentado 50 aspirantes.

"Gane quien gane las elecciones al Rectorado necesitamos un cambio de actitud. El gobierno de Salustiano Mato lo impuso todo. Y lo que pedimos no es diálogo, que es insuficiente, sino negociación real para llegar a acuerdos con alumnos, profesores y PAS. Y nosotros estamos para aportar, no para fastidiar", sostiene Xoán Cebro, delegado sindical de CIG y presidente de la Junta de PAS funcionarios.

Una de la principales quejas del colectivo es la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT), aprobada el año pasado. "En un día, el 80% del personal tuvo que cambiar de puesto obligatoriamente. Nos vendieron que el nuevo modelo mejoraría la gestión, pero en un mes ya estaban introduciendo modificaciones y se ha seguido cambiando a medida que aparecían problemas", critica.

"Uno de los muchos ejemplos de que la RPT no funciona es que los alumnos de Pontevedra y Ourense, que antes disponían de una unidad de gestión para tramitar sus becas, ahora son desviados a Vigo por vía telefónica o bien tienen que desplazarse. Y el registro de Torrecedeira desapareció de un día para otro", añade Cebro.

"Pero también son muy importantes los procedimientos. Los trabajadores tenemos que saber qué hacer en cada momento para ofrecer un buen servicio a profesores y estudiantes. Y otro problema es la burocratización. La Xunta ha establecido un control de facturas a partir de 5.000 euros pero el equipo de gobierno de la Universidad va más allá en su aplicación. Si un profesor quiere comprar un bolígrafo en una librería, ésta tiene que estar dada de alta en el aplicativo de Facenda. La gente está desilusionada, va a trabajar sin ganas", lamenta.

"La autopista está mal", diagnostica Cebro, y mientras un candidato propone "parchear" el otro quiere reformarla por completo. "En mi opinión, Emilio Fernández es continuista y Pachi Reigosa quiere recuperar ya los derechos que perdimos con Salustiano Mato", resume.

La presidenta del Comité de Empresa del PAS laboral de Pontevedra y delegada de CC OO, Marisa Magaz, también es crítica con el equipo saliente. "A grandes líneas le pediríamos al próximo rector que haga lo que no hizo el que se va. Había un compromiso de funcionarizar al PAS laboral que no se ha llevado a cabo. Pedimos que se ajuste la RPT y llevamos años reclamando una carrera profesional", resume sobre sus principales reivindicaciones.

Ambos candidatos, reconoce, muestran "un talante negociador", mientras que la concurrencia de Mato en solitario en las últimas elecciones marcó la falta de diálogo de su último mandato. "Siempre tiene que haber oposición. Aplicaron todo por mayoría absoluta", reprocha.

Magaz también reivindica el papel del personal de administración y servicios en el buen funcionamiento de la Universidad: "Los dos candidatos saben que somos muy necesarios. El colectivo lo formamos desde técnicos de laboratorio que hacen posible la investigación, hasta los conductores, bibliotecarios y personal de conserjerías o del área de deporte. Pertenecemos a muchas categorías y damos apoyo a docentes y alumnos".